Durante el verano la dermatitis atópica mejora gracias a la radiación ultravioleta y a la reducción del estrés propia del periodo vacacional, pero en otoño las cosas cambian y la piel se somete a la acción del frío, el viento, la calefacción y el estrés que aparece con la vuelta a la rutina diaria.
Los expertos recomiendan extremar el cuidado de la piel antes de la llegada del otoño
Por ello, los expertos recomiendan adelantarse a la nueva estación y que los pacientes con dermatitis atópica mejoren las condiciones de la piel lo máximo posible, para que pueda enfrentarse en las mejores condiciones a las inclemencias del tiempo. El cumplimiento del tratamiento médico debe ser ahora riguroso y se deben incrementar los cuidados cosméticos para mejorar la hidratación de la piel y su función barrera.
Por otro lado, los primeros días de colegio pueden contribuir a la aparición de un brote agudo de dermatitis atópica a causa de la ansiedad y el estrés que originan en el niño. Por tanto, los padres deben estar atentos a cualquier cambio en la piel del menor para proceder a tratar el brote lo más rápido posible.