El farmacéutico es clave para detectar a los pacientes que se automedican y sufren cefaleas por abuso de medicación

El dolor de cabeza es una dolencia que en muchas ocasiones se produce por el uso indebido de fármacos por parte del paciente, ya que la automedicación no responsable puede evolucionar a la cefalea por abuso de medicación, de carácter crónico y difícil control.
La prevalencia de los trastornos neuropsiquiátricos como las cefaleas o migrañas, depresión, ansiedad o trastornos del sueño, que suponen problemas de salud de primer orden, hace necesario que el farmacéutico recicle sus conocimientos en esta área.
En consonancia con la responsabilidad del consejo farmacéutico ante este tipo de situaciones, este mes comienza el cuarto módulo del curso "Guías Clínicas para la Intervención Farmacéutica en Trastornos Neuropsiquiátricos", desarrollado por ratiopharm, y cuyo contenido ha sido elaborado por la Digest de Información Científica para Atención Farmacéutica (DICAF) y avalado por la Fundación Pharmaceutical Care.

El dolor de cabeza es una dolencia muy común que afecta al 42% de la población general y que causa un elevado número de bajas laborales y una notable disminución del rendimiento en el trabajo. En muchas ocasiones esta dolencia se produce por el uso indebido de fármacos por parte del paciente, ya que la automedicación no responsable puede evolucionar a la cefalea por abuso de medicación, de carácter crónico y de muy difícil control.

Detectar a los pacientes que se automedican e identificar problemas relacionados con los medicamentos, así como prevenir el mal uso y abuso del mismo, es clave para mejorar la calidad de vida de los pacientes.

Ante la necesidad creciente de reciclaje en esta área y en consonancia con la importancia y mayor protagonismo del farmacéutico en la detección del mal uso de medicamentos y la responsabilidad de su consejo ante situaciones de automedicación, este mes comienza el cuarto módulo del curso "Guías Clínicas para la Intervención Farmacéutica en Trastornos Neuropsiquiátricos", desarrollado por ratiopharm, y cuyo contenido ha sido elaborado por la Digest de Información Científica para Atención Farmacéutica (DICAF) y avalado por la Fundación Pharmaceutical Care.

Según Javier García, director de marketing de ratiopharm, "el objetivo del farmacéutico en estos casos debería ser reconocer y actuar ante la primera crisis del paciente, evitando así la automedicación". A su vez, asegura que "la prevalencia de los trastornos neuropsiquiátricos en la sociedad hace imprescindible que el farmacéutico refuerce su intervención en esta área". Y es que, la ansiedad, la depresión, los trastornos del sueño y las migrañas y cefaleas son los trastornos neurosiquiátricos de mayor prevalencia en la población y son considerados problemas de salud pública de primer orden con una gran repercusión sobre la calidad de vida de pacientes y familiares.

Cuatro módulos coordinados por Martha Milana, Doctora en Farmacia

El curso desarrollado por ratiopharm comenzó el pasado mes de septiembre y está coordinado por Martha Milena Silva Castro, Doctora en Farmacia, Máster en Atención Farmacéutica y coordinadora de la Unidad de Optimización de la Farmacoterapia. Asimismo, ha sido acreditado por la Comisión de Formación Continuada de las Profesiones Sanitarias de la Comunidad de Madrid con 6 créditos, lo que supone una ventaja para farmacéuticos que quieran optar a cualquier puesto que oferte el sistema sanitario.

En total, el curso consta de 4 módulos sobre ansiedad, depresión, trastorno del sueño y tratamiento de la migraña y las cefaleas.

"Este curso constituye una guía útil y sirve de herramienta clínica para abordar las consultas de los pacientes que acuden a la farmacia, permitiendo al farmacéutico derivarlos adecuadamente a los servicios de salud idóneos y contribuyendo al seguimiento de los tratamientos de aquellas personas que ya han sido diagnosticadas y están siendo tratadas", concluye Javier García.

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Es un dolor de cabeza muy intenso que dura en torno a cuatro horas o más y que suele ser incapacitante. Suele afectar medio cráneo y ser pulsátil (es decir "que late"). Se manifiesta con intolerancia a la luz y a los ruidos, y puede ir acompañado de náuseas, vómitos y diarrea. Es típica la aparición de auras (se ven centelleos) antes de instaurarse la migraña.

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