Según datos de un estudio realizado por el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) y el Instituto de Medicina Sexual (IMS), el aumento de las relaciones sexuales en verano se relaciona con el aumento del riesgo de cistitis.
Según explica el Dr. Manuel Fernández Arjona, urólogo del IMS y jefe del Servicio de Urología del Hospital del Henares (Madrid), "en verano hay un incremento de las relaciones sexuales. Las largas horas de luz y la temperatura incrementan los niveles hormonales y el deseo sexual. A ello se une el disponer de más tiempo libre, más contactos sociales o convivencia con la pareja y un incremento del consumo de alcohol, que produce desinhibición".
Este aumento en las relaciones viene acompañado de más consultas por cistitis, según advierte este experto, ya que "durante el coito, no solo hay un intercambio de bacterias sino que pueden entrar con más facilidad, al estar la uretra más estirada".
Para prevenir la cistitis, INFITO y el IMS recomiendan a las personas que sufren esta patología de forma frecuente beber al menos dos litros de agua al día, el vaciamiento inmediato de la vejiga tras el coito y el uso de preparados farmacéuticos de plantas medicinales como el arándano americano.