El consumo de drogas legales o ilegales en el trabajo sigue siendo un reto de salud laboral. Tal y como recuerda la doctora Adela Radut, médica del Trabajo de IMQ Prevención, empresa líder en el sector en Euskadi, con motivo de la celebración, el próximo 26 de junio, del Día internacional de la lucha contra el consumo indebido de drogas, "las repercusiones del consumo de drogas y alcohol en el ámbito laboral pueden ser muy graves. Se estima que entre un 15 y un 30% del total de los accidentes de trabajo están relacionados con el consumo de drogas y alcohol. Es decir, más de una cuarta parte del total de accidentes laborales ocurren en trabajadores que se encuentran bajo los efectos del alcohol o drogas, causándose lesiones a sí mismos o a terceros".
"Y no solo accidentes", apunta Adela Radut, médica del Trabajo de IMQ Prevención, "el absentismo entre los trabajadores consumidores de drogas es de dos a tres veces mayor y el coste de las bajas por enfermedad que generan también es tres veces superior respecto al resto de trabajadores".
Del mismo modo, la Organización Internacional del Trabajo establece que el 10% de las personas que trabajan tiene problemas de adicciones y que originan el 80% de los problemas de personal.
Obligación de abordar este problema
Dentro de los programas de salud laboral, según la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, se establece la obligación del empresario de protección a los trabajadores frente a los riesgos laborales. "En el caso de las drogodependencias de los trabajadores, aunque se trata de un problema social y personal que extralimita el ambiente laboral, se debe contemplar la prevención, no sólo del consumo, sino de las consecuencias del mismo, puesto que el trabajador adicto puede ocasionar accidentes muy graves, a sí mismo y a otras personas, además de daños colaterales".
Existen diferentes canales y herramientas para detectar una drogodependencia en el entorno laboral. "El médico de trabajo es la persona idónea para detectar alteraciones relacionadas con el consumo de riesgo de alcohol y drogas. También es el referente al que el trabajador o trabajadora puede dirigirse para realizarle consultas espontáneas. El personal sanitario garantiza la confidencialidad de la información relativa a su estado de salud", explica la experta de IMQ Prevención.