La técnica de estimulación magnética transcraneal (EMT) se encuentra limitada a unos pocos hospitales públicos y desde la Psiquiatría Clínica solicitamos su extensión. Pese a sus ventajas, no forma parte de la cartera de servicios del Servicio Nacional de Salud (SNS) español. Se trata de una opción efectiva y segura que presenta efectos secundarios escasos y de poca relevancia en la mayoría de los casos.
Estas afirmaciones han sido realizadas por el Dr. Álvaro Moleón, psiquiatra en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, durante un taller sobre Neuromodulación que ha tenido lugar en el XXXII Curso Nacional de Actualización en Psiquiatría que se ha celebrado en Vitoria-Gasteiz. Se trata de la reunión decana de la Psiquiatría estatal y de referencia anual en la que se presentan las actualizaciones y líneas estratégicas en salud mental.
Durante el taller, el especialista ha hecho una revisión de la situación actual y un análisis a futuro a corto plazo en el manejo de la estimulación magnética transcraneal en lo que concierne a las patologías para las que está indicada hoy en día (principalmente TOC y depresión), las patologías que tratará a corto plazo, sus efectos secundarios y contraindicaciones.
En primer lugar, ha explicado que la EMT "es una terapia física de neuromodulación no invasiva que permite modular la actividad de los circuitos neuronales través de un campo electromagnético que se genera con una bobina que se coloca sobre la superficie del cráneo. Este campo magnético atraviesa el cráneo y llega hasta la corteza cerebral, produciendo la activación o la inhibición de las neuronas que forman parte de los circuitos afectados en diversas patologías mentales".
"Pese a sus ventajas no forma parte de la cartera de servicios del Servicio Nacional de Salud y su uso todavía se encuentra limitado a unos pocos hospitales públicos en España". "Se trata de una opción efectiva y segura que presenta efectos secundarios escasos y de poca relevancia en la mayoría de los casos, siendo la cefalea transitoria el más frecuente, y la convulsión el más grave, aunque su incidencia es mínima: un caso cada 40.000 sesiones de EMT, aproximadamente", ha subrayado el experto.
Más usos de la técnica
Respecto al futuro más cercano de la técnica, el Dr. Moleón ha dado a conocer que "en la actualidad se están estudiando nuevas posibles indicaciones en patologías como la esquizofrenia, la adicción a sustancias psicoactivas, la ludopatía, y estrés postraumático". "Por su parte, en el campo de la Neurología se ha demostrado su potencial para el dolor neuropático y las secuelas motoras del ictus. Sobre esto último, en las principales guías clínicas ya tiene un nivel de evidencia A que constata que es muy eficaz".
"También se está estudiando si dentro de la propia técnica se pueden mejorar resultados en el futuro a corto plazo como es el uso de la modalidad en Theta Burst Stimulation (TBS), mediante el empleo de ráfagas. La liberación de pulsos en tripletes disminuye sustancialmente el tiempo de estímulo, permitiéndonos así dar más sesiones en un día y conseguir lo que se llaman protocolos acelerados. Estamos viendo que son más efectivos que los protocolos diarios y que gozan de una tolerabilidad similar. Tienen una mayor adherencia del paciente. Al tener que venir menos días los pacientes fallan menos a las citas", ha hecho hincapié.
Efectividad
Durante el taller, el especialista ha afirmado que han "realizado una comparación entre la estimulación magnética transcraneal (EMT) con la Terapia Electroconvulsiva (TEC), siendo mucho mejor tolerada la EMT". "La TEC consiste en producir una ligera actividad convulsiva mediante la administración de un estímulo eléctrico corto a través de electrodos que se colocan en la superficie craneal. Esta actividad convulsiva produce cambios bioquímicos en el cerebro que ayudan a la mejora, o incluso a la remisión de los síntomas".
Por último, ha destacado que "se está optimizando la técnica de la EMT con el uso de un neuronavegador tras haber realizado previamente una resonancia magnética craneal (estandarizada o, preferentemente, funcional) y un electroencefalograma".
"En conclusión, el futuro de la EMT va en la dirección de ofrecer un mayor número de pulsos en cada sesión, con un mayor número de sesiones cada día de tratamiento, el empleo del neuronavegador y electroencefalograma, además del uso también del multi target y realizar un trabajo psicoterapéutico durante el tiempo que el paciente está recibiendo la sesión. Con estas optimizaciones, cada paciente puede recibir una neuromodulación personalizada mejorando notablemente los resultados".