Fundamento
Cuando una pareja decide tener un hijo, desea asegurarse de que el niño no nacerá con ningún tipo de discapacidad psíquica, física o sensorial que se pueda detectar.
Los constantes y extraordinarios avances de la medicina de nuestros días tienen reflejo también en el área del diagnóstico prenatal. Diferentes técnicas permiten hoy diagnosticar un creciente número de enfermedades o defectos congénitos en fetos antes de su nacimiento Gracias a la rapidez del diagnóstico, que permite tomar decisiones para el futuro de forma más temprana, se pueden evitar preocupaciones y sufrimientos a la mujer. En caso de que se detecte alguna alteración fetal, los profesionales informarán a la mujer de su pronóstico y de las posibilidades que le ofrece el sistema sanitario para que, conociendo el problema, pueda tomar la decisión que considere más adecuada. Algunas de estas alteraciones pueden tratarse antes de que el bebé nazca, mientras que otras pueden necesitar tratamiento especial inmediatamente después del nacimiento. Igualmente, en algunos casos los padres podrían decidir no continuar con el embarazo.
Una de estas técnicas de diagnóstico prenatal, la de más frecuente utilización y de mayor rendimiento diagnóstico, es la amniocentesis.