Un grupo de investigadores de la Universidad de Carolina de Sur ha investigado la conducta de aproximadamente 550 hombres y Salud de la mujeres durante todo un año respecto a sus hábitos de ejercicio físico y cantidad e intensidad de sus resfriados.
El resultado ha sido revelador y ha demostrado que quienes hacían, al menos, 30 minutos de ejercicio moderado varias veces por semana contrajeron un solo catarro, mientras que los inactivos sufrieron cuatro resfriados como mínimo.
La razón está en que la actividad física moderada estimula el funcionamiento del que sirve para vencer las infecciones.
Por el contrario, el estudio mostró que el exceso de ejercicio tiene el efecto contrario, pues desequilibra la protección y, por eso, muchos deportistas se acatarran tras una competición.