Sin la protección necesaria, deportes como el esquí y el snowboard pueden ser de alto riesgo. Cada vez hay más conciencia de la importancia de usar casco para proteger la cabeza de lesiones graves en caso de choques y caídas, pero un casco convencional no protege de las lesiones en la boca y la mandíbula, una zona extremadamente vulnerable.
Por ello, la Sociedad Catalano-Balear de Cirugía Maxilofacial ha remarcado la importancia del uso de un casco integral que proteja también esta zona del cuerpo. Según el Dr. Joan Birbe, presidente de dicha sociedad, "podríamos pensar que los protectores de este tipo solo son para los profesionales del esquí, que alcanzan velocidades de más de 100 kilómetros por hora. Pero no es necesario ser profesional para sufrir un traumatismo grave. El uso de protectores bucales es importante para la protección del área maxilofacial, que es muy vulnerable. Las lesiones en esta zona son peligrosas y existe el riesgo de que dejen secuelas".
Un elevado porcentaje de las lesiones de los menores de 15 años se asocian a lesiones de cabeza, cara, boca u orejas. Aunque en España hay aún pocos datos sobre este tipo de lesiones, se calcula que por el hecho de llevar una protección facial o bucal cuando se realiza un deporte de riesgo o de contacto, se podrían evitar hasta un 60% de estas lesiones.
Las fracturas de los huesos de la cara ocasionan problemas tanto desde el punto de vista estético como funcional. Por ello, en los deportes en los que hay una gran posibilidad de choque o de caída en superficies duras, como es el caso del esquí y el snowboard, es muy recomendable utilizar protectores bucales.
Un protector bucal es un aparato flexible hecho de plástico que se usa en la práctica de algunos deportes para proteger los dientes de un posible trauma. Además de proteger la dentadura, estos protectores evitan fracturas de los huesos faciales, que pueden llegar a causar deformidades en la cara. También pueden proteger de conmociones cerebrales, hemorragias cerebrales y lesiones en el cuello.