El tratamiento de algunas patologías y la recuperación de lesiones ha encontrado un aliado con la electroestimulación

Son muchas voces las que hablan de los problemas de la electroestimulación y el excesivo daño muscular que puede llegar a provocar. También es verdad que cuando hablan de sus contraindicaciones es porque lo mencionan como una solución única y "de moda" para ponerse en forma sin ningún esfuerzo.

Sin embargo, cuando la electroestimulación se ve como una herramienta adicional que ayuda a combatir el sedentarismo, como una parte integral del proceso, o incluso pudiéndose introducir en otras líneas de trabajo que habitualmente no se tienen tan en cuenta y que pueden ser de gran ayuda. Hablamos de la recuperación funcional de patologías relacionadas con el aparato locomotor u otras patologías que impiden realizar ejercicio físico convencional con normalidad. Lo que pretende es mejorar el reclutamiento y eficacia de la contracción voluntaria. De esta manera se consigue minimizar la atrofia y mejorar los niveles de fuerza. Esto funciona muy bien en algunos casos pre y postoperatorios, periodos de inmovilización y patologías que desarrollan atrofia muscular, entre otros.

Para Héctor Otero (Doble titulado en CAFYD y Fisioterapia) de F.A.S.T Fitness "Gracias a la activación muscular directa sin sobrecargas articulares, es el entrenamiento indicado para personas con hernias y protusiones discales, osteoporosis, alteraciones musculares u óseas, recuperación de lesiones o intervenciones además de la recuperación postparto".

Es verdad que la electroestimulación puede ayudar a la recuperación y funcionar como una terapia muy eficaz para tratar algunas patologías, pero es totalmente necesarioque este seguimiento deba ser supervisado por profesionales especializados como es el caso de Licenciados en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte y Fisioterapeutas que den seguimiento, asesoramiento y una progresión adecuada a cada paciente y sus necesidades.

¿Entonces la electroestimulación es eficaz? Por supuesto, siempre y cuando sea supervisado por profesionales mediante un seguimiento individual y adecuado a cada uno de los pacientes que se someten a este método.

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