La IV Reunión Anual de Terapéutica en Psiquiatría reunió en Barcelona los días 20 y 21 de marzo a más de 150 expertos en salud mental de todo el mundo con el objetivo de analizar las últimas experiencias y novedades en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades mentales graves.
La depresión fue una de las enfermedades mentales tratadas durante este encuentro. Cristóbal Gastó, Psiquiatra del Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínic de Barcelona y catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Barcelona, explicó que "la depresión está sobrediagnosticada pero paradójicamente, infratratada". Esto se debe al hecho de que el diagnóstico de la depresión se ha banalizado, ya que los diversos síntomas permiten que los especialistas hagan un diagnostico rápido.
Sin embargo, las personas que realmente presentan un estado depresivo, muchas de las veces no son conscientes de ello y tardan tiempo en asistir a un psiquiatra. "Todos tendremos síntomas depresivos en alguna etapa de nuestra vida, se trata de un estado reactivo de la mente humana frente a determinados problemas de la vida, pero eso no significa que debamos tomar antidepresivos ni que tengamos ninguna enfermedad depresiva", añadió.
Este estado de tristeza transitoria, conocido en psiquiatría como "trastorno adaptativo con estado de ánimo depresivo", puede ser tratado con antidepresivos, pues los psiquiatras aseguran que ayudan al paciente a tolerar con más facilidad un momento negativo de su vida.
Sin embargo, el Psiquiatra del Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínic de Barcelona, Víctor Navarro, diferenció claramente el uso de fármacos en personas que presentan una depresión y en personas que presentan un estado de tristeza. "Cuando los síntomas de depresión son realmente intensos y prolongados, los fármacos son la mejor solución, pero si esos síntomas no son intensos y hablamos sólo de un periodo de tristeza, no es útil tan sólo el uso de fármacos, ya que casi seguro es necesario, además, un tratamiento psicológico. Un psicólogo puede ayudar al paciente a pasar por esa situación de malestar asociada a una causa concreta que le provoca ese malestar". En realidad, las distintas formas de depresión son muy amplias, lo que permite que se solapen unas a otras y sea difícil establecer un diagnostico diferencial muy preciso. Víctor Navarro estableció dos elementos característicos de las personas que realmente presentan un estado de depresión: la pérdida repentina de la valoración personal (el autojuicio de la persona cambia de forma radical); y la falta de reacción ante estímulos positivos o negativos, es decir, la indiferencia ante ellos.
Para este grupo de psiquiatras, a pesar de las dificultades inherentes al diagnóstico diferencial en el área de la psiquiatría, desde el punto de vista clínico, establecer un diagnóstico diferencial preciso determina no sólo la elección de un programa de tratamiento adecuado y efectivo sino también el acceso al cuerpo de conocimientos almacenados con relación al curso de desarrollo y el pronóstico general de cada patología.
Trastornos de salud mental
Los trastornos de la salud mental todavía constituyen un grave y costoso problema a nivel mundial, que afecta a personas de todas las edades, de todos los países y de cualquier nivel socioeconómico. La depresión grave es la cuarta en importancia por años de vida adaptada a una discapacidad y está próxima a ser la segunda causa de discapacidad a escala mundial. Según la OMS, de los 450 millones de personas que se estima sufren un trastorno de salud mental en el mundo, menos de la mitad recibe la atención que necesita.