La Sociedad Española de Cardiología (SEC) ha puesto de manifiesto, en el marco de la celebración del Congreso de las Enfermedades Cardiovasculares SEC 2011, la importancia que tiene la enfermedad cardiovascular en la mujer, a pesar de encontrarse aún en inferioridad de condiciones en cuanto al diagnóstico, el tratamiento y la representación en los estudios epidemiológicos.
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte entre las mujeres españolas, con el 35,10% de los fallecimientos. Actualmente, las enfermedades cardiovasculares son las responsables del fallecimiento en España de más de 65.000 mujeres al año, tal y como muestran los registros del Instituto Nacional de Estadística (INE), superando ya en un 7,66% a las muertes masculinas por este motivo.
Las diferencias frente al sexo masculino, en cuanto a mortalidad por una patología cardiovascular, son cada vez más amplias en España. Las enfermedades cardiovasculares tienen distinta incidencia, evolución y pronóstico en la población en función del sexo. Sin embargo, hasta hace pocos años, ni la sociedad ni los expertos han asumido estas diferencias, perjudicando significativamente a la mujer.
Las mujeres suelen presentar una edad superior a la de los hombres cuando padecen enfermedad cardiovascular y ello complica la recuperación. A partir de la menopausia, la mujer muestra un peor pronóstico que el hombre, pues deja de recibir la protección natural de los estrógenos y, con ello, se multiplican los factores de riesgo cardiovascular, produciéndose más diabetes, hipercolesterolemia y obesidad. Concretamente, a partir de los 50 años, el 50% de las mujeres padece hipertensión y una de cada tres, diabetes o trastornos del metabolismo de los hidratos de carbono o colesterol elevado.
Uno de los obstáculos añadidos para la mejora en la detección de las enfermedades cardiovasculares en el sexo femenino es que la mayor información sobre la eficacia de las estrategias terapéuticas se obtiene de estudios y ensayos clínicos en los que se incluyen mayoritariamente varones. Además, frente a los mismos síntomas de enfermedad cardiovascular, solo el 15% de las mujeres reciben un tratamiento adecuado, mientras que el porcentaje llega hasta el 56% en los varones.
Conscientes de los hechos diferenciales entre las mujeres y los hombres en relación al diagnóstico y al tratamiento de la enfermedad cardiovascular y ante la ausencia de estudios observacionales en mujeres, la SEC está promoviendo el registro SIRENA, el primer estudio observacional sobre cardiopatía isquémica estable en la mujer que se realiza en Europa.