El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales ha suspendido temporalmente de forma cautelar el acuerdo para la compra centralizada de productos sanitarios, propuesto por el Ministerio de Sanidad, después de que dicho Tribunal admitiera el recurso presentado por la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN) contra el Acuerdo Marco elaborado por el Instituto de Gestión Sanitaria (INGESA), que establece el criterio económico como el único para adjudicar la compra centralizada de productos como los medidores de glucosa en sangre.
La Federación de Diabéticos Españoles (FEDE) cree que esta suspensión temporal puede ser positiva ya que, este periodo podría ser una oportunidad para que el Ministerio de Sanidad se replantee el nuevo sistema de adquisición centralizada.
Según la FEDE, en el caso de los diabéticos, este sistema reduciría el número de medidores de glucemia disponibles en el mercado, ya que al tener en cuenta solo el criterio económico se fomenta el monopolio en este tipo de productos sanitarios.
Desde la asociación se cree que este tipo de medidas suponen un importante perjuicio para la calidad de vida de los pacientes crónicos. Su puesta en marcha podría implicar, además, la pérdida de adherencia al tratamiento o la reducción en la innovación.