La Fundación Asyter proporciona a los enfermos renales de Castilla La Mancha un programa pionero de ejercicio físico intradiálisis

Este programa de actividad física fue incorporado hace un año a las actividades de apoyo social desarrolladas por la Fundación Asyter
Alrededor del 60% de los pacientes que se han sumado al programa siguen desarrollando la actividad durante un periodo superior a 12 meses
Las mejoras en el estado anímico y físico de los pacientes son los principales beneficios de este programa

La Fundación Asyter, organización sin ánimo de lucro que presta asistencia a los pacientes de enfermedad renal crónica de Castilla-La Mancha y sus familiares, añadió hace un año a sus programas de asistencia social el programa de ejercicio intradiálisis. Desde entonces, casi el 20% de los pacientes de las clínicas de Asyter se han ido sumando a este proyecto que les reporta mejoras en su capacidad funcional, en su estado anímico y, en algunos casos, contribuye a aliviar algunos de los síntomas derivados de su tratamiento de hemodiálisis. Esta iniciativa de la Fundación Asyter es una experiencia pionera para los enfermos renales de Castilla-La Mancha.

Ejercicio físico bajo supervisión médica

Antes de incorporar a un paciente en tratamiento de hemodiálisis al programa de ejercicio físico, el equipo sanitario de las Clínicas Asyter realiza una evaluación para constatar cuál es su estado y determinar cuál serán las actividades que puede ejecutar. En general, el entrenamiento dura entre 30 y 45 minutos, entre calentamiento y ejercicios, y se reparte entre las 3 sesiones semanales de hemodiálisis. Las actividades incluyen, entre otros, ejercicios aeróbicos (pedaleo) y otros de fuerza-resistencia, que se llevan a cabo con bandas elásticas, pesas y pelotas.

Según explica José Antonio Herruzo, Director Médico de las Clínicas Asyter, "hemos decidido poner en marcha este programa por los beneficios demostrados que tiene el ejercicio físico en los enfermos renales, en cuanto a la mejora de su capacidad funcional, de la tolerancia al tratamiento, de su estado nutricional y de su estado anímico. Todo ello supone un incremento de su calidad de vida".

El programa ha sido diseñado por Sonsoles Hernández Sánchez, Asesora de Ejercicio Físico en Poblaciones Especiales, especializada en diálisis y trasplante, quien ha configurado el programa de actividades más adecuado a los pacientes en tratamiento de hemodiálisis, y la adaptación particular a cada uno de ellos en función de su estado y necesidades.

Las sesiones de ejercicio físico se desarrollan durante la administración del tratamiento de hemodiálisis en las propias clínicas Asyter, bajo la supervisión del personal de enfermería que atiende de manera cotidiana a los pacientes.

Para Emilia Villanueva, Supervisora de Enfermería de la Clínica Asyter de Talavera de la Reina, "desde el primer momento de la implantación del programa de ejercicio intradiálisis todo el personal de las clínicas se ha implicado para proporcionar a nuestros pacientes un servicio de valor añadido que les reporta importantes beneficios en su salud tanto física como mental".

Más agilidad y mejor humor

Desde la puesta en marcha del programa de ejercicio el año pasado, el número de pacientes adscritos al mismo ha ido creciendo paulatinamente hasta llegar a casi 75 (alrededor del 20% de los pacientes atendidos en las Clínicas Asyter). No solamente es relevante el número de pacientes que se benefician del programa, si no el que siga aumentando constantemente y que los enfermos que comiencen a desarrollar la actividad física sigan incluidos en el programa 12 meses después de haberlo iniciado (un 60%).

En palabras de Mariano Arranz Sierra, paciente de la Clínica Asyter de Talavera de la Reina, "desde que he comenzado a practicar el ejercicio intradiálisis me encuentro más ágil para realizar mis tareas cotidianas y ya no noto tanto cansancio tras el tratamiento de hemodiálisis. Evidentemente, al sentirme mejor esto hace que me encuentre de mejor humor, por lo que recomiendo a otros pacientes que estén en la misma situación que yo que empiecen a practicar ejercicio físico de manera controlada".

Con la colaboración de un partner de prestigio internacional

Por su parte, la compañía Technogym, líder mundial en el sector de las soluciones para Fitness y Wellness, se ha sumado al proyecto al financiar durante 2 años parte de los equipamientos técnicos necesarios para el desarrollo de la actividad.

En palabras de Renato Senta, Managing director de Technogym en España, "esta iniciativa es fiel a la misión de Technogym que bien podemos resumir en el lema "healthy people, healthy planet". Desde hace mucho Technogym fomenta el Wellness como estilo de vida y el ejercicio físico como método de prevención y cura. Por ello Technogym es partner en iniciativas como esta y de la iniciativa "Excercise is medicine" del ACSM y AMA cuyo objetivo es dar al ejercicio físico el rango de "signo vital", que debería medirse en cualquier examen clínico y los médicos deberían prescribirlo como si de una medicina se tratara".

Cinco tipos de intervención directa

Además del programa de actividad física intradiálisis, la Fundación Asyter ha puesto en marcha 4 programas de intervención directa en Toledo, Cuenca, Albacete y Ciudad Real,  que complementan el tratamiento médico que se administra a los enfermos renales. Son los programas de voluntariado -los enfermos renales reciben ayuda en sus tareas cotidianas y acompañamiento por parte de voluntarios- talleres de atención en prediálisis -con los que se prepara e informa a los pacientes que van a iniciar un tratamiento renal sustitutivo de cuál va a ser su nueva situación vital- servicio de ayuda a domicilio -con prestaciones para aquellos pacientes que, a causa del tratamiento, ven reducida su autonomía para su cuidado o para realizar tareas domésticas- y servicio de atención social -proporcionando información y orientación sobre recursos sociales, e incluso, en los casos que así lo requieran, fondos para la adquisición de alimentos o medicamentos.

El objetivo de estos programas es el de proporcionar a los pacientes de enfermedad crónica renal de Castilla La Mancha las herramientas necesarias para aumentar su calidad de vida, su autonomía y su integración social.

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