La gripe en los pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma u otras patologías relacionadas con el sistema respiratorio puede desencadenar un incremento de su afección, además de generar alguna otra complicación como bronquitis y neumonías que podrían llegar a ser graves en algunos casos.
Por esta razón, el Consenso 2012 de vacunación de grupos de riesgo frente al virus de la gripe, elaborado por diversas sociedades científicas españolas, entre ellas la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), y el Grupo de Estudio de la Gripe (GEG), recomienda la inmunización frente a la gripe de este grupo de riesgo.
Según recomienda la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), "los pacientes con afecciones pulmonares deben inmunizarse contra la gripe debido a que es una infección que afecta directamente al sistema respiratorio y que puede desencadenar complicaciones muy graves que, en algunos casos, pueden llegar a no superar". La Dra. Pilar de Lucas, presidenta de SEPAR comenta que "es necesario además, prestar especial atención a los enfermos de EPOC en estadios avanzados, ya que las agudizaciones desencadenas por la infección gripal motivan un número importante de ingresos hospitalarios y son causa de una mortalidad significativa".
Por su parte, el Dr. Ramón Cisterna, coordinador del GEG y jefe del Servicio de Microbiología Clínica y Control de la Infección del Hospital de Basurto (Bilbao), también subraya que "la vacunación está especialmente indicada en quienes padecen patologías crónicas como afecciones respiratorias debido al peligro que supone el virus para su salud. Y es que podrían tener más complicaciones en el caso de padecer una infección gripal, ya que en muchos casos la gripe puede provocar una descompensación de su problema crónico que puede prevenirse mediante la vacunación".
En la actualidad, existen múltiples estudios que han demostrado que la inmunización es efectiva en los pacientes con enfermedades respiratorias y especialmente cuando se trata de personas mayores, ya que la gripe puede manifestarse en forma de bronquitis y neumonía bacteriana secundaria o acentuar las crisis de asma y de la EPOC.