Una de cada seis parejas presenta problemas de fertilidad, que afectan por igual a hombres y mujeres. Entre las causas se encuentra la clamidia, una de las enfermedades de transmisión sexual más frecuentes y más difícil de detectar debido a sus escasos síntomas. El 50% de los casos de clamidia puede ocasionar una enfermedad pélvica inflamatoria causante de la infertilidad. Con motivo del Día Europeo de la Salud Sexual, que se celebra el 14 de febrero, se recomienda realizar revisiones ginecológicas anuales, sobre todo en mujeres en edad reproductiva.
La clamidia es una enfermedad de transmisión sexual silenciosa y frecuente. En 2015, se diagnosticaron 3.563 casos en España de los cuales, un 57,1% fueron en mujeres. "Esta enfermedad bacteriana adquirida por contacto sexual, pueden derivar en una enfermedad inflamatoria pélvica que, si no se trata a tiempo, puede provocar la infertilidad de la mujer", explica la doctora Victoria Verdú, coordinadora de ginecología de la Clínica Ginefiv. "En el caso de los hombres, la clamidia pueden llegar a producir epididimitis, una inflamación en el epidídimo, la zona donde maduran los espermatozoides. Un mal o tardío tratamiento también podría llegar a provocar esterilidad", continúa la doctora.
El 50% de los casos de esterilidad es de origen femenino, siendo el causante en un 40% de estos una patología en las trompas de Falopio. Las causas más comunes de estas dolencias son las infecciones –como la clamidia- que pueden ocasionar enfermedad pélvica inflamatoria, es decir, una inflamación del suelo pélvico producida por una infección en los órganos reproductivos. La incidencia de esterilidad tras sufrir una enfermedad pélvica inflamatoria es del 13%, aumentando al 35% después de dos y al 75% después de tres o más episodios. Además, tras una enfermedad pélvica inflamatoria el riesgo de gestación ectópica aumenta entre seis y siete veces.
Revisiones periódicas podrían evitar el 50% de los casos de infertilidad por enfermedades de transmisión sexual
La clamidia apenas presenta síntomas, por lo que detectarla es complicado. "Entre los síntomas que se pueden apreciar destacan la sensación de ardor al orinar, dolor durante las relaciones sexuales o un flujo vaginal anormal", explica la doctora Verdú.
Promover hábitos saludables y cuidados que ayuden a mejorar la salud reproductiva es fundamental para evitar la infertilidad causada por enfermedades de transmisión sexual. Entre las recomendaciones que apunta la Dra. Verdú, señala la importancia de llevar a cabo revisiones periódicas. "Debería ser una prioridad tanto para hombres como para mujeres, sobre todo en edad reproductiva. En más de la mitad de los casos, coger a tiempo este tipo de enfermedades evita que lleguen a sufrir infertilidad".
Por otro lado, la doctora Verdú apunta que "es necesario educar y concienciar acerca de la importancia de llevar buenos hábitos de salud sexual y de conocer los antecedentes sexuales de la pareja, puesto que una actividad muy elevada y con diferentes parejas aumenta las probabilidades de sufrir una ETS y con ello poner en peligro la capacidad reproductiva tanto del hombre como de la mujer".