Un estudio publicado en la última edición de la Revista Española de Cardiología (REC), realizado en cuatro hospitales universitarios de Cataluña, ha analizado la evolución de la mortalidad intrahospitalaria y del pronóstico a seis meses en los pacientes que ingresan con un primer infarto agudo de miocardio (IAM).
Entre las principales conclusiones del estudio es destacable que la mortalidad hospitalaria y la tasa de recaídas a los seis meses de los pacientes con un primer IAM han disminuido en la última década. Al comparar ambos periodos, son destacables las reducciones en algunos datos, como los casos de muerte intrahospitalaria, que se redujeron en un 32,2%, y los casos de muerte tras seis meses después del episodio de IAM, que se redujeron en un 57%. Además, el reingreso de causa cardiovascular (reinfarto, angina, insuficiencia cardiaca o arritmias) se redujo en un 54% a los seis meses del infarto.
Cada año se producen en España unos 50.000 infartos, su tratamiento ha cambiado considerablemente en los últimos años. En la actualidad se realiza más terapia de reperfusión, especialmente angioplastia primaria y fibrinólisis, en el infarto y más procedimientos invasivos, como cateterismos cardiacos, con revascularización percutánea (ICP) y más cirugía coronaria. Asimismo, los tratamientos médicos que han demostrado evidencia clínica en el infarto (antiagregantes, betabloqueantes, estatinas e inhibidores de conversión de angiotensina), se aplican de forma mayoritaria en estos pacientes, cosa que no sucedía hace una década. El estudio "Recursos Empleados en los Síndrome Coronario Agudo y Tiempos de Espera" (RESCATE), se realizó con el objetivo de determinar si la disponibilidad de recursos terciarios en el hospital de ingreso de los pacientes con un primer IAM tenía relación con el número de procedimientos diagnósticos y terapéuticos realizados y si su disponibilidad se asociaba a diferente pronóstico intrahospitalario y a seis meses.
Para llevar a cabo el estudio, se comparó el manejo clínico, la mortalidad hospitalaria y el pronóstico, así como la evolución a seis meses entre dos periodos: el primero, RESCATE I, comprende los datos obtenidos en 1.440 pacientes con edades entre 25 y 80 años que ingresaron entre 1992 y 1994, en cuatro hospitales con un primer IAM de menos de 72 horas de evolución. El segundo periodo, RESCATE II, comprende datos de 1.288 pacientes con las mismas características y que ingresaron en los mismos hospitales entre 2001 y 2003. En ambos periodos se recogieron, además de variables demográficas, otros datos como antecedentes de hipertensión, diabetes mellitus, hipercolesterolemia, tabaquismo o angina previa. Los hospitales que participaron en las dos fases del estudio son el Hospital del Mar y el Hospital Clínic, ambos de Barcelona, el Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona y el Hospital Josep Trueta de Girona
Al comparar los resultados de ambos estudios, es destacable que durante el segundo periodo se realizaron más procedimientos invasivos (coronariografía, ICP y cirugía de revascularización) y ecografías, aunque menos pruebas de isquemia, que en el primer periodo. RESCATE II muestra una mayor proporción de pacientes hipertensos, dislipémicos y con IAM no Q.
Este descenso de mortalidad y de reingresos no está relacionado con cambios en las características clínicas ni en la gravedad de los pacientes con IAM. Para el Dr. Cosme García-García, autor del estudio, cardiólogo del Hospital del Mar de Barcelona y miembro de la Sociedad Española de Cardiología, "el incremento en la utilización de las terapias de reperfusión, el manejo más invasivo en los pacientes con IAM (mayores tasas de revascularización percutánea y quirúrgica) y probablemente las mejoras en el tratamiento médico realizado pueden explicar el descenso en la mortalidad intrahospitalaria y el mejor pronóstico a medio plazo de los pacientes con un primer IAM".