La Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) se suma a la conmemoración del Día Internacional del Niño con Cáncer, que tiene lugar el 15 de febrero, y destaca el valor de la protonterapia como tratamiento fundamental en los tumores pediátricos, en la mejora de la supervivencia de los menores con cáncer y en su calidad de vida, y en la minimización de secuelas y neoplasias posteriores gracias a su precisión. La protonterapia, una modalidad de radioterapia que utiliza protones en lugar de rayos X o electrones, está disponible en dos centros en España. La donación de la Fundación Amancio Ortega permitirá la creación de 10 nuevas unidades de protonterapia. Además, una iniciativa pública/privada proyecta otro en Santander.
Alrededor de 1.100 niños enferman de cáncer cada año en España, de acuerdo con los últimos datos del Registro Español de Tumores Infantiles (RETI- SEHOP). Constituye la primera causa de muerte por enfermedad en los más pequeños dentro de los países desarrollados. La supervivencia a los cinco años de los menores de 14 con cáncer en España es del 82,5%, lo que refleja un gran avance en los últimos años, pues ha aumentado un 43% desde 1980.
Los tumores más frecuentes son leucemias (30%), linfomas (13%) y tumores del sistema nervioso central (22%). La radioterapia forma parte del tratamiento multimodal de la mayoría de tumores sólidos infantiles junto con la cirugía y la quimioterapia. Una de las principales indicaciones de la protonterapia es precisamente en los tumores en la población pediátrica, fundamentalmente los localizados en el sistema nervioso central y en los que se sitúan próximos a órganos de riesgo como la médula, corazón, pulmones…
La doctora Mónica Ramos Albiac, coordinadora del Grupo de Tumores Pediátricos de la SEOR y oncóloga radioterápica en el Hospital Universitrio Vall d'Hebron (Barcelona), señala que "la radioterapia juega un papel importante en el tratamiento curativo de los tumores cerebrales pediátricos, así como también de los sarcomas de Ewing, rabdomiosarcomas, tumores de Wilms y neuroblastomas. Durante los últimos diez años las técnicas de irradiación han mejorado de forma que cada vez podemos ser más precisos en la administración de la dosis de radioterapia y evitar zonas de tejido sano cercanas a la zona de tratamiento. De esta forma, podemos minimizar los efectos no deseados a largo plazo en muchos de los niños que se curan del cáncer infantil. En este escenario, el tratamiento con protones está teniendo un papel fundamental en los últimos años, permitiendo disminuir todavía más la dosis a tejidos sanos y mejorando la calidad de vida futura de nuestros pacientes pediátricos con cáncer de hoy".
En España existen dos unidades de protonterapia operativas: el Centro de Protonterapia Quironsalud en Pozuelo de Alarcón (Madrid) y la Unidad de Protonterapia de la Clínica Universidad de Navarra en Madrid. La donación de la Fundación Amancio Ortega permitirá la creación de 10 nuevos centros de protonterapia en España, concretamente localizados en Madrid (2), Barcelona (2), Santiago de Compostela, San Sebastián, Valencia, Málaga, Sevilla y Las Palmas. Por otra parte, una iniciativa público/privada permitirá abrir otra unidad en Santander, concretamente en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. De esta forma, España se situará a la vanguardia europea en Oncología Radioterápica.