La diabetes tipo 2 se ha convertido en uno de los problemas sanitarios más importantes de los últimos años.
La epidemia de obesidad y del sedentarismo ha llevado a un gran incremento de su prevalencia en España y, con ello, a un aumento del gasto sanitario. Según los resultados de un estudio recientemente publicado, la prevalencia de la enfermedad entre las personas mayores de 18 años en España es del 13,8%, de los que un 6% desconocen que la padece. Además, se prevé que la tendencia para los próximos años también vaya en aumento.
Además de hiperglucemia, las personas con diabetes suelen presentar otros factores de riesgo como hipertensión, obesidad y dislipemia, lo que hace que presenten un elevado riesgo cardiovascular y acudan con asiduidad al sistema sanitario.
Por ello, el médico de Atención Primaria (AP) es clave en el diagnóstico precoz, tratamiento y seguimiento de las personas con diabetes, así como en la prevención de la enfermedad.
Según ha destacado el Dr. José Javier Mediavilla, coordinador del Grupo de Trabajo de Diabetes Mellitus de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), en el marco de las VI Jornadas de diabetes en Atención Primaria, organizadas por SEMERGEN y la Sociedad Española de Diabetes (SED), "al ser la diabetes tipo 2 una enfermedad crónica, el médico de AP es el profesional sobre el que debe pivotar la atención de estos pacientes, tanto por su accesibilidad y cercanía como por la continuidad e integración de cuidados que caracterizan al primer nivel asistencial". De hecho, las consultas relacionadas con la enfermedad ocupan hasta un 15% de todas las que se realizan en AP.