Alrededor de un millón de personas en España sufren arritmia cardiaca, condición responsable de 24.000 fallecimientos cada año.
Actualmente, uno de cada cuatro mayores de 40 años padecerá este problema, cuya incidencia está creciendo en los últimos años, según datos epidemiológicos.
Dada su prevalencia, importancia e impacto socio-sanitario es preciso sensibilizar a la población en su prevención y control, generar información y conocimiento y fomentar iniciativas que permitan mejorar su diagnóstico y tratamiento.
Con estos objetivos se presenta la Alianza de la Arritmia (www.alianzadelaarritmia.org), organización no lucrativa de ámbito nacional que reúne a profesionales sanitarios y pacientes para atender y representar las necesidades relacionadas con las arritmias.
"Las arritmias son una proceso cada vez más frecuente, que tiene múltiples causas y diferentes tipos de consecuencias, desde muy benignas a algunas graves. El que la población tenga una mayor concienciación de cómo detectarlas, de cuáles pueden ser los signos de alarma y cuáles no, así como una mejor gestión del proceso puede facilitar el reconocimiento precoz y dar una mayor motivación para adherirse al tratamiento", subraya el presidente de la Alianza, el Dr. Ángel Moya, cardiólogo y presidente de la Sección de Electrofisiología y Arritmias de la Sociedad Española de Cardiología (SEC).
Esta iniciativa pone en común, por primera vez, a todos los actores implicados en el diagnóstico y tratamiento de las arritmias: a los propios pacientes y a los médicos que tratan estas patologías desde diferentes ámbitos. Así lo destaca Ricardo Barat, vicepresidente 1º de la Alianza, paciente y miembro de Federación Española de Asociaciones de Anticoagulados (FEASAN), quien señala que "para los pacientes con arritmias, la creación de esta Alianza supone un punto de inflexión importante, ya que profesionales de la salud y pacientes trabajaremos juntos, analizando necesidades y proponiendo iniciativas de valor compartido e impacto social en la sociedad, especialmente en los pacientes".
En este sentido, para el Dr. Salvador Tranche, vicepresidente 2º de la Alianza, médico de familia, y vicepresidente de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), "los mejores resultados en el abordaje de las arritmias se consiguen cuando médicos de familia y cardiólogos trabajan colaborativamente y cuentan con la capacitación del paciente, implicado en la gestión de su enfermedad".
Retos en el manejo de las arritmias
La detección precoz, el manejo de los factores de riesgo, el control de ictus en la fibrilación auricular, mejorar el conocimiento de profesionales no expertos y pacientes y el desarrollo de una estrategia nacional de las arritmias, son algunos de los principales retos identificados por la Alianza de la Arritmia.
"Es preciso desarrollar una estrategia que acerque las arritmias a los pacientes, ya que resulta clave implicarles en el conocimiento y manejo de su propia enfermedad", apunta el Dr. Moya.
"Una mejor comprensión por parte de los pacientes de su proceso ayudará a entender el porqué de diferentes estrategias, como por ejemplo la anticoagulación, o cómo deben manejarse aquellos que llevan diferentes tipos de dispositivos, como marcapasos o desfibriladores. Ello no sustituye en absoluto las indicaciones del médico que trata al paciente, pero puede ayudar a una mejor gestión de su enfermedad, por un lado ayudando a aclarar algunas dudas y, por otro, creando foros de pacientes en los que se compartan experiencias o se transmitan dudas", explica el presidente de la Alianza.
Por su parte el Dr. Tranche comenta la importancia de la participación de los médicos de familia en esta Alianza. "El médico de familia es el primer profesional sanitario al que frecuentemente acude el paciente; determinadas arritmias suceden sin o escasos síntomas, otras producen síntomas inespecíficos como mareos o malestar general. Igualmente, un número considerable de los pacientes que sufren parada cardiorrespiratoria son atendidos por médicos de familia (ya sea en centros de salud o en los dispositivos de urgencias); de ahí la importancia de conocer en profundidad esta patología, causas, posibles consecuencias y contar con formación en habilidades y conocimientos".
Precisamente, uno de los primeros pasos de esta nueva organización será llevar a cabo un análisis de la comprensión, tanto por parte de los pacientes como de médicos no especialistas, de los dispositivos para el tratamiento de las arritmias, como son marcapasos y desfibriladores, ya que se trata de dispositivos complejos y de amplio uso entre la población y de los cuales hay un cierto desconocimiento. A partir de esta encuesta se analizarán las acciones que se deben emprender. Por otro lado, la Alianza organizará el I Workshop sobre las Arritmias en el que, profesionales sanitarios y pacientes debatirán sobre la situación actual de las diferentes tipologías de arritmias proponiendo una hoja de ruta.
La Alianza de la Arritmia es una entidad que integra a sociedades científicas, asociaciones de pacientes y otras organizaciones afines. En su fundación han participado la Sección de Electrofisiología y Arritmias de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), la Federación Española de Asociaciones de Anticoagulados (FEASAN) y la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) y una de las primeras acciones que iniciará será invitar a participar a otras sociedades científicas y organizaciones de pacientes con el objetivo de ir sumando asociados y también perspectivas.
Consecuencias de sufrir arritmias
Una arritmia es una alteración del ritmo cardiaco. Sus consecuencias y efectos dependen del tipo que se trate.
Así, por ejemplo, la principal complicación de la fibrilación auricular es el tromboembolismo y muy especialmente el ictus. Este tipo de arritmia es la más frecuente en las consultas de Atención Primaria, ya que afecta a entre el 1 y el 2 por ciento de los pacientes, y su incidencia se multiplica hasta por seis a partir de los 70 años, explica el Dr. Tranche.
Igualmente, desde FEASAN se ha trabajado en conocer la situación de la fibrilación auricular. "Es importante que la ciudadanía conozca bien los signos de alerta/síntomas de ésta para poder diagnosticarla cuanto antes. Hay que tener en cuenta que quienes estamos diagnosticados de fibrilación auricular tenemos un riesgo cinco veces mayor que la población general de sufrir un ictus, por ello la detección precoz es clave para prevenir una situación a la que ningún paciente nos gustaría llegar. En este sentido, es esencial la implicación del paciente en el control del tratamiento anticoagulante, dado que una mala adherencia puede condicionar nuestra vida", afirma Ricardo Barat.
Por su parte, el Dr. Moya redunda en la idea de la importancia de tener información sobre la diversidad de las arritmias, tanto para evitar miedos irracionales ante algunas de ellas, como para entender los riesgos reales de otras y reconocer las señales de alerta a tiempo.
En las arritmias, hay diferencias según la edad, el género, así como por el hecho de tener o no patologías cardiacas subyacentes. Así, la fibrilación auricular (FA) es más frecuente entre las mujeres, siendo el aumento de la edad y el sexo femenino factores que aumentan el riesgo de padecer tromboembolismo con FA.