Una madre extremeña ha creado un producto que se convierte en una alternativa para los padres preocupados por este problema.
Se trata de Otostick Bebé un corrector estético transparente formado por dos láminas de silicona que se fijan a la cabeza y a la oreja, con adhesivos hipoalergénicos, y hacen que la oreja se mantenga en la posición adecuada. De tamaño similar al de una lentilla, son indoloras, prácticamente invisibles, no requieren prescripción médica y pueden usarse a partir de los tres meses.
Se calcula que alrededor de un 5% de la población tiene las orejas despegadas. Una situación que puede originar preocupaciones estéticas que afecten a diario a los niños. Francisca Gamero, una madre emprendedora que vivió este problema con su hija, ha creado una solución. Gamero, que ha contado con la colaboración de las Universidades de Alicante y de Extremadura para el desarrollo de una adhesión inocua, ha lanzado al mercado Otostick Bebé recomendado para los más pequeños: "Queremos que el corrector actúe desde los primeros meses de vida, que es cuando mejores resultados pueden obtenerse", comenta.
Dado que las intervenciones quirúrgicas no están recomendadas antes de los 7/8 años, Otostick Bebé es una alternativa, fácil de usar y sin efectos secundarios, que corrige estéticamente y previene la separación de las orejas. "De efecto muy natural, puede acabar con los malos ratos de los más pequeños y evitar futuros complejos y problemas", añade su creadora.
De venta en farmacias y parafarmacias, Otostick Bebé garantiza un resultado estético inmediato, de manera sencilla y sin necesidad de cirugía. La duración de cada corrector es de dos a siete días. Está fabricado en España y tiene un precio recomendado de 17,95 € el pack de 8 unidades.