En el marco de la celebración el próximo 1 de diciembre del Día Mundial del Sida, se ha presentado el balance del primer año de puesta en marcha del proyecto ‘Cortesía'. Gracias a esta iniciativa 64 mujeres con virus de inmunodeficiencia humana (VIH), pertenecientes a 33 hospitales españoles, han podido beneficiarse de leche maternizada gratuita con el fin de evitar la transmisión de madre a hijo del VIH.
"La existencia de este programa es muy positiva porque completa el programa de prevención de la trasmisión del VIH de madre a hijo"
Este proyecto es una iniciativa del Dr. Luis Fernando López Cortés, de la Unidad Clínica de Enfermedades Infecciosas, Microbiología y Medicina Preventiva del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla que está avalado por GeSIDA y se lleva a cabo en colaboración con Abbott.
Según indica Amparo Lluch, jefa de Sección del Servicio de Farmacia del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, "la existencia de este programa es muy positiva porque completa el programa de prevención de la trasmisión del VIH de madre a hijo. Las mujeres que forman parte del programa están encantadas ya que detectan que se atiende integralmente el proceso que garantiza la seguridad del recién nacido frente a la posibilidad de trasmisión del virus VIH".
La transmisión del VIH de madre a hijo
Según los expertos de GeSIDA, la transmisión de madre a hijo representa entre el 15 y el 30% de los casos de infección de VIH en el mundo. La lactancia materna es una de las principales vías de transmisión vertical en los países sin recursos económicos. Mientras que la transmisión durante el embarazo y parto han disminuido considerablemente a menos del 1% con la administración de terapia antirretroviral y medidas de profilaxis, la trasmisión vertical del VIH durante la lactancia ocurre en un 7 a un 15% de recién nacidos no infectados. Este riesgo puede prevenirse por completo evitando la lactancia.
No todos los hijos de madres infectadas con VIH alimentados con lactancia materna adquieren la infección por VIH ya que esto depende de múltiples factores como la carga viral de la madre, grietas en el pezón, mastitis e inmadurez del sistema inmune del recién nacido, entre otros. No obstante, la recomendación de la lactancia artificial en todos los casos, junto con el uso de terapia antirretroviral y la cesárea electiva en los casos indicados, ha conseguido disminuir la tasa de transmisión vertical del VIH a menos del 1% en los países desarrollados.