Investigadores del Grupo Eugin han presentado los datos de un estudio en el que la técnica de reproducción asistida ROPA (Recepción de óvulos de la pareja) en parejas de mujeres parece tener tasas de éxito superiores a la FIV (fecundación in vitro) convencional, en la que la mujer gestante aporta también el óvulo.
La técnica ROPA permite implicar en el proceso de tener un bebé a las dos integrantes de la pareja, ya que ambas se involucran en el tratamiento: una aporta sus óvulos y la otra gesta el bebé. Pero a esta ventaja se le suma también una tasa de niño nacido mayor, según el estudio que se ha presentado hoy en el 35 Congreso Anual de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE), celebrado en Viena.
En su estudio, los investigadores compararon los resultados del primer ciclo de reproducción asistida de 70 parejas de mujeres que habían optado por la técnica ROPA para ser madres con otras 140 parejas que realizaron una FIV. Ambos grupos de parejas tenían una edad similar y se transfirieron el mismo número de embriones, también similares en cuanto a su calidad.
El resultado que arrojó la investigación es que las parejas que habían realizado la técnica ROPA lograron una mayor tasa de embarazo y de niño nacido que las parejas que habían realizado una FIV convencional. En el caso de la tasa de niño nacido, la diferencia fue de un 53% en ROPA, frente a un 29,3% en FIV.
"Cuando nos planteamos el estudio, pensábamos que los resultados de la técnica ROPA iban a ser similares a los de la FIV convencional; no esperábamos encontrar estas tasas de éxito tan altas con ROPA", explica la doctora Désirée García, coautora del estudio.
La ventaja de compartir el tratamiento
En sus conclusiones, los autores del estudio aportan una explicación a los mejores resultados en favor del ROPA. En el caso del ROPA, la mujer gestante realiza un tratamiento para preparar su útero, pero no realiza la estimulación hormonal previa necesaria para obtener los óvulos, lo que permite que su útero afronte la implantación y gestación embrionaria en mejores condiciones.
"Nuestro estudio sirve para avalar la técnica ROPA, pero eso no significa que los otros métodos, como la FIV convencional, no sean válidos. De hecho la técnica ROPA no puede ofrecerse en todos los casos", precisa García. En este sentido, la investigadora argumenta que las técnicas de reproducción se deben ofrecer en función de cada caso, según las características biológicas, antecedentes médicos y circunstancias de los miembros de la pareja, ya que no siempre hay opción de elegir entre una u otra técnica. "El estudio viene a demostrar que, en mujeres que puedan elegir, ROPA es una opción perfectamente válida y exitosa", concluye.
La técnica ROPA acumula muchos años de experiencia en nuestro país, aunque no está cubierta por la Seguridad Social y exige que ambas mujeres estén casadas. La técnica se ha confirmado como una opción ampliamente extendida entre las parejas de mujeres lesbianas que quieren ser madres y alternativa a otras técnicas más convencionales, como la inseminación artificial o la fecundación in vitro, en las que el tratamiento lo realiza sólo una de las mujeres con propios óvulos.