Un grupo de investigadores del Instituto de Investigación del Vall d'Hebron ha determinado por primera vez un vínculo entre la inflamación de bajo grado, típica de las personas con obesidad y diabetes tipo 2, y los niveles bajos de proteína transportadora de hormonas sexuales.
Siempre se ha relacionado la diabetes y la obesidad con niveles bajos de hormonas sexuales, sobre todo la testosterona en los hombres, y esto se había atribuido a la hiperinsulinemia o concentraciones elevadas de insulina en la sangre. Aparte de disfunción eréctil, los niveles bajos de la proteína transportadora de hormonas sexuales y de testosterona se asocian a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.
Esta investigación, cuyos resultados se publican en la revista Diabetes, determina que no son los propios niveles de insulina los que producen este descenso de la proteína transportadora de hormonas sexuales sino que la reducción de la producción hepática de esta proteína dependerá del grado de inflamación y es el TNF alfa (proteína mensajera de la inflamación) el responsable de la caída de esta proteína y, por tanto, de las hormonas sexuales en las personas que presentan obesidad o diabetes mellitus tipo 2.
Este descubrimiento, según sus responsables, permitirá diseñar estrategias terapéuticas más dirigidas y abre un nuevo campo que conecta la inflamación con los niveles de hormonas sexuales y puede explicar por qué en muchas enfermedades crónicas se encuentran niveles disminuidos de hormonas sexuales.