Según ha declarado Juan Pedro-Botet, presidente de la Sociedad Española de Arteriosclerosis (SEA), en unos debates sobre riesgo cardiovascular patrocinados por Esteve, las unidades de lípidos de la sociedad científica han conseguido reducir casi a la mitad la probabilidad de padecer infartos e ictus isquémicos en personas con elevado riesgo vascular en sus más de 25 años de vida.
Además, según ha añadido Pedro-Botet, "estas unidades especializadas, consiguen mejorar la calidad de vida en pacientes con evidentes factores de riesgo (hipercolesterolemia, hipertensión, diabetes, obesidad, factores genéticos, hipertrigliceridemia u obesidad), evitando accidentes vasculares de difícil solución".
Estas unidades avaladas por la SEA son imprescindibles en la sociedad española actual en la que tres de cada 10 personas sufren una enfermedad cardiovascular. En concreto, las enfermedades cardiovasculares continúan siendo la primera causa de muerte en los países desarrollados y constituyen el mayor coste en la sanidad pública.
Además, según ha asegurado el experto, "su existencia es imprescindible debido a la complejidad clínica de las enfermedades vasculares, la necesidad de una atención especializada de calidad en este terreno y el carácter multidisciplinario de la asistencia en este ámbito".
Las unidades de lípidos detectan, evalúan y tratan a individuos con alteraciones lipídicas y riesgo vascular elevado, con el fin de prevenir la arteriosclerosis y sus implicaciones clínicas, integrando y coordinando los recursos asistenciales disponibles en el área de referencia. Además, otra de sus funciones principales es desarrollar la investigación, docencia y educación para la salud en el campo de la prevención cardiovascular.