El inicio de la temporada de playa nos invita a poner una especial atención en la protección y el cuidado de nuestra piel para evitar quemaduras. La firma Genosun (Laboratorio Genové) destaca que la elección de filtros físicos o químicos es uno de los factores clave, y aconseja usar un buen preparador solar de forma previa, durante y después de la exposición solar.
Los filtros solares deben ser nuestros aliados a la hora de protegernos de la radiación solar. Pero, ¿qué sabemos de ellos? Existen dos tipos de filtros que protegen a la piel de la radiación solar: los filtros físicos y los filtros químicos. Los primeros son aquellos que forman una pantalla sobre la piel y evitan así que los rayos del sol penetren. Los filtros químicos, en cambio, son moléculas que absorben la radiación ultravioleta y la transforman en una radiación menos energética y menos dañina.
Filtros físicos, ideales para bebés y pieles sensibles
Los filtros físicos son sustancias inorgánicas inertes de origen mineral que reflejan la radiación ultravioleta impidiendo que ésta se absorba.
Al realizar una pantalla sobre la piel, este tipo de filtros no se absorben, y es por ello que su uso suele estar recomendado para bebés. Las pieles alérgicas, reactivas o con dermatitis también deben protegerse con este tipo de filtros a la hora de exponerse ante los rayos solares.
Filtros químicos: absorber la radiación para transformarla
Los filtros químicos basan su mecanismo de protección en la absorción de la radiación solar ultravioleta. Su constitución está formada por moléculas que pueden absorber los rayos UVA y UVB con el objetivo de proteger las capas más profundas de la piel.
Los filtros químicos son estructuras orgánicas que, al recibir los rayos UVA y UVB, cambian de estructura. Su mecanismo de acción se basa en el hecho de que al entrar en contacto con la radiación solar la absorben y la transforman en otro tipo de radiación inofensiva para la piel.
La importancia del Astaxactive
Los fotoprotectores y preparadores solares Genosun contienen Astaxactive, un complejo elaborado a base de Astaxantina, Vitamina E y β- caroteno. Se trata de un potente antioxidante que permite que el proceso oxidativo de la piel sea menor cuando se expone a los efectos de los rayos del sol.