La retinosis pigmentaria es un grupo de enfermedades hereditarias de la retina caracterizadas clínicamente por mala visión nocturna, constricción progresiva del campo visual y pérdida progresiva de agudeza visual hasta derivar en la ceguera total. Esta enfermedad, que en España afecta a más de 25.000 personas, carece de tratamiento efectivo actualmente. Retrasar su desarrollo o mejorar la visión de los pacientes es la única vía hasta el momento en el tratamiento.
"Ante esta situación, la terapia con células madre en el tratamiento de la retinosis pigmentaria se presenta como alternativa terapéutica para mejorar la calidad de vida de los pacientes", afirma Santiago Luengo, director general del banco de células madre SECUVITA.
En 2006, Lambda y cols demostraron la posibilidad de obtener neuronas retinianas a partir de células madre embrionarias humanas (revista Proc Natl Acad Sci U S A. 2006;103(34):12769). Más recientemente el equipo de Scwartz y cols de Los Angeles, California, presentaron los datos de los primeros ensayos clínicos fase 1 y 2 en pacientes con diversas distrofias retinianas, empleando células pigmentarias de la retina obtenidas a partir de células madre embrionarias. Sus resultados, publicados en la revista The Lancet (vol 385, feb 7,2015), mostraron que las células trasplantadas injertan en la retina y mejoran, al menos parcialmente, la agudeza visual de los pacientes.
"Teniendo en cuenta que las células madre de la sangre del cordón umbilical son semejantes en muchos aspectos a las células embrionarias y conservan gran parte de sus características de multipotencialidad y plasticidad, podrían ser una atractiva alternativa al uso de células embrionarias para esta enfermedad", aclara Jaime Pérez de Oteyza, director médico de SECUVITA. "Las ventajas que a priori tendrían las células de la sangre del cordón umbilical serían la disponibilidad inmediata sin necesidad de manipular embriones y la ausencia de riesgo de desarrollo de tumores, que es uno de los problemas potenciales de la células embrionarias", añade.
En España, recientemente el Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca de Murcia ha concluido una investigación basada en la inyección de células madre mononucleadas autólogas extraídas de la médula ósea del propio paciente con resultados positivos y sin complicaciones ni molestias en los pacientes, logrando retrasar la evolución de la enfermedad.
"Nos estamos acercando a la posibilidad de devolver la vista a personas que la han perdido, no mediante el uso de medicamentos, sino de células vivas capaces de regenerar su retina", declara el director médico de SECUVITA.