La alimentación o la exposición a sustancias como la nicotina son solo algunos de los factores que las futuras mamás controlan más durante los meses de gestación. Sin embargo, además de los cuidados comunes a cualquier estación, cada época del año tiene unas recomendaciones específicas de cara al embarazo.
"El calor o la fuerte incidencia de los rayos ultravioleta procedentes del sol hacen que el verano sea una de las épocas en las que las embarazadas deben tomar más precauciones", advierten desde Ava, compañía médica suiza creadora de la primera pulsera capaz de detectar los días más fértiles de cada mujer.
Por ello, si estás embarazada y quieres saber cómo disminuir las molestias durante las próximas semanas, ¡toma nota a este listado de consejos elaborado por los expertos médicos de Ava!
- Evita los viajes largos. Especialmente durante el tercer trimestre de embarazo, no es recomendable realizar trayectos demasiado largos. Si, pese a ello, te decides a hacerlo, procura levantarte cada poco tiempo para poder estirar las piernas. Además, es aconsejable viajar a lugar cercanos, para no estar demasiado lejos de casa en caso de que el parto de adelante o aparezca alguna complicación. Del mismo modo, viajar a lugares con diferente huso horario provocará con total seguridad jet lag, haciendo más complicado el conciliar el sueño. ¡Y ya sabes que descansar y dormir al menos 8 horas diarias es fundamental, sobre todo si estás embarazada!
- Aprovecha para hacer ejercicios acuáticos. Salvo que seas más de montaña, las piscinas y el mar están presentes en casi cualquier destino vacacional. Si eres de las que disfruta haciendo deporte, estás de suerte. Los ejercicios acuáticos mejoran el tono muscular y, al estar moviéndote, también favorecerás la circulación. Además, el agua facilitará el trabajo al hacer que la tripa te pese menos y tu espalda no sufra tanto.
- Elige tu ropa con cuidado. El verano es una de las mejores épocas para lucir cuerpo, incluso tu barriguita de embarazada. Y, aunque te encante el vestido que acabas de ver en las rebajas, es recomendable que mires primero la etiqueta para ver su composición. "Los materiales artificiales impiden la transpiración, por lo que la sensación de calor será mayor. Por ello, los tejidos naturales como el lino o el algodón son la mejor opción para las futuras mamás", explican. Olvida también las prendas ajustadas, y es que estas no hacen sino dificultar la circulación. Ya sabes: si quieres reducir el calor y la hinchazón a máximo, ¡opta por tejidos naturales y ropa holgada!
- Hidrátate. Con total seguridad, tu médico te habrá explicado los beneficios de mantenerte hidratada durante los meses de gestación, además de recordarte la importancia del agua para la formación del líquido amniótico. Por todos es sabido que la hidratación es fundamental durante los meses de verano, pero más si cabe en caso de que estés embarazada. Por ello, lleva siempre contigo una botella de agua, sobre todo si vas a estar expuesta al sol. También puedes incluir en tu dieta frutas con alto contenido en agua, como la sandía.
- ¡Cuidado con el sol! Este es otro de los consejos que debes tomar especialmente en serio si estás esperando un bebé. Debido al aumento en el nivel de estrógenos durante la gestación, la pigmentación que se produce al tomar el sol es mayor que si no estuvieras embarazada. Asimismo, las náuseas y los mareos, típicos durante el primer trimestre de embarazo, pueden aumentar si pasas mucho rayo bajo los rayos UV.
"Los cuidados durante el embarazo en los meses más calurosos del año son fundamentales. Además de aumentar las precauciones, también es recomendable recurrir a wearables como la pulsera Ava, que permite a las futuras mamás hacer un seguimiento del embarazo con gráficas sobre datos como la temperatura o las horas de sueño", recuerdan los expertos de la compañía.