La pérdida de grasa combinando dieta y ejercicio es más saludable que si se restringe sólo la alimentación, según un estudio realizado por el Instituto Navarro del Deporte que se ha publicado en la revista International Journal of Obesity.
El estudio demuestra que la pérdida de grasa en la zona abdominal en una dieta con una restricción calórica es distinta a cuando dicha dieta hipocalórica se combina con un programa de entrenamiento de fuerza. En este último caso la perdida de grasa se produce en la región superior del abdomen, mientras que cuando se realizaba exclusivamente una dieta hipocalórica la pérdida de grasa se produce en la parte inferior del abdomen.
Los investigadores concluyen que el ejercicio físico combinado con una dieta hipocalórica puede tener un efecto de disminución de la grasa abdominal más asociada con los factores de riesgo cardiovascular, en comparación a cuando se realiza de manera exclusiva un régimen alimenticio. Además la pérdida de grasa se acompaña de una mejora de los niveles basales de insulina, de la sensibilidad a la insulina o del colesterol total.
Estos resultados pueden ser de gran importancia para el manejo de los factores de riesgo cardiovascular o de las enfermedades asociadas al sedentarismo como la obesidad y la diabetes tipo 2.