El riesgo de reacción alérgica por alimentos en niños aumenta en Navidades debido a las comidas fuera de casa, según advierte la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP). La SEICAP recuerda que uno de cada cinco casos de anafilaxia en menores sucede en el exterior de la vivienda y la mayoría son causados por alergias alimentarias. En Navidades, "suelen ser comunes los descuidos, existe falta de información por parte de quien prepara la comida y también hay niños que prueban por primera vez ciertos alimentos como los frutos secos o mariscos", afirma el doctor Luis Echeverría, coordinador del Grupo de Trabajo de Alergia Alimentaria de la SEICAP. Para evitar reacciones, los pediatras alergólogos recomiendan extremar las precauciones para prevenir una posible ingesta accidental y para ello han editado la guía Navidades felices y seguras para niños alérgicos a alimentos disponible en su página web www.seicap.es.
Entre un 4 y un 8% de la población infantil padece alergia alimentaria y los alimentos que la causan son el huevo, la leche, los frutos secos, el pescado, el marisco, las legumbres y las frutas, por ese orden, según la SEICAP. "Las alergias alimentarias están aumentando mucho en los últimos años por lo que no es extraño encontrarnos con al menos un niño alérgico en la mesa durante la cantidad de comidas que se hacen en Navidades", asegura el doctor Echeverría. Además, "hay que tener en cuenta que muchos menores prueban por primera vez ciertos alimentos en estas fechas, por lo que será preciso estar alerta de qué es lo que comen por si sufren una posible reacción", comenta. Este especialista señala así la importancia de conocer de primera mano el menú y, si es posible, acordarlo con el familiar encargado de preparar la cena o la comida para evitar riesgos innecesarios. "Quien vaya a cocinar debe tener toda la información sobre las alergias de los pequeños para tomar precauciones, tanto en los procesos de elaboración de los platos como a la hora de servirlos, pues conviene que no existan fuentes para compartir", señala.
Por otro lado, se debe prestar especial atención al etiquetado de los productos que van a componer el menú navideño. "Hay que saber identificar los alimentos que puedan estar ocultos, en forma de trazas o que aparecen en las etiquetas como aditivos o con nombres técnicos", indica el doctor Echeverría. Desde febrero de 2015 existe la obligación por decreto de facilitar la información alimentaria de aquellos alimentos que se presenten sin envasar o envasados en el momento de compra, ya que, según se explica en el artículo, la mayoría de incidentes de alergia alimentaria tienen su origen en ellos. "Como ya denunció la SEICAP, esto no se está cumpliendo en todos los establecimientos o se está informando mal, por lo que se debe estar alerta ante cualquier presencia de alérgenos puesto que las consecuencias pueden ser fatales", explica.
Otro de los consejos que incluye la guía de SEICAP es no aislar al niño alérgico. "No debemos aislarles ni apartarles a la hora de sentarse a la mesa. Deben ser como uno más para no sentirse excluidos", apunta el doctor Echeverría. Además, es importante no ofrecerles alimentos, "a pesar de que cada vez más estos niños están muy concienciados con su enfermedad, pero siempre puede haber alguno que no lo esté o que sea demasiado pequeño como para saber qué puede comer", añade.
Reacciones anafilácticas
En caso de que un niño alérgico ingiera algo por accidente durante una comida navideña, "se deberá observar el tipo de reacción y actuar en consecuencia ya que puede sufrir un shock anafiláctico", subraya el doctor Echeverría. En caso de anafilaxia o reacción severa, será preciso administrar la adrenalina, "por lo que es recomendable que la familia no salga de casa sin esta medicación de rescate, algo que suele quedar en el olvido", admite. Un estudio reciente publicado en The Journal of Pediatrics confirmó que el 84% de los casos de anafilaxia registrados durante un año fueron desencadenados por alimentos.
Las reacciones suelen aparecer de forma inmediata durante la primera hora e "incluyen urticaria, angioedema, asma, rinitis, conjuntivitis, síntomas digestivos o reacciones de anafilaxia en los casos más graves", enumera el doctor Echeverría. Si los síntomas son digestivos se recomienda darles líquidos de rehidratación y antihistamínicos, para los síntomas de piel se suelen usar también antihistamínicos, igual que para los de nariz o de ojos. En todos los casos anteriores se pueden usar corticoides tomados o inyectados.