Los meses de invierno generalmente van asociados a enfermedades en las vías respiratorias. Estos procesos pueden ir desde simples catarros hasta cuadros infecciosos importantes como pueden ser bronquitis o neumonías.
Durante estos días de enero nos encontramos con frecuencia en la consulta a pacientes que vienen sin saber muy bien si el cuadro que presentan de mocos y estornudos se debe a un simple resfriado o si están padeciendo algún proceso alérgico.
La alergia al polen no se limita a la primavera, tenemos partículas de polen en el ambiente todos los meses del año, particularmente en invierno encontramos una alta sensibilización al polen procedente de la familia de las Cupresáceas (ciprés, arizónicas, tuyas, enebro), originando síntomas típicos de alergia respiratoria: mucosidad, estornudos, lagrimeo, picor, e incluso dificultad respiratoria.
A veces es difícil poder diferenciarlos con exactitud y hay que dejar evolucionar el proceso durante unos días para averiguar si se trata de un cuadro alérgico o no. Generalmente existen una serie de signos y síntomas que nos ayudan mucho a la hora de diferenciarlos:
- Si se padece una alergia la secreción nasal (mucosidad) es clara, líquida y transparente; en caso de gripe o resfriado es bastante más densa o incluso espesa y el moco suele tener alguna tonalidad (amarillenta o incluso verdosa).
- La alergia suele asociarse picor importante de nariz y ojos que, en el caso de gripe o resfriado es mucho más leve o no existe.
- En la alergia aparece lagrimeo ocular de forma frecuente, mientras que en el caso de gripe o resfriado no suele existir, dándose tan sólo molestia a nivel ocular.
- En la alergia los estornudos son muy frecuentes y se producen de forma espasmódica (en salvas, varios seguidos); en el resfriado o la gripe los estornudos aparecen pero más aislados, no en salvas.
- La alergia nunca ocasiona fiebre, que suele asociarse en caso de gripe o resfriado si existe infección o complicación con sinusitis, otitis, bronquitis o neumonía. Además, en la gripe o el resfriado puede aparecer dolor de garganta y/o de oídos.
- En la alergia si aparece tos suele ser seca, sin mucosidad; en caso de gripe o resfriado, si se desencadena tos, esta suele ser con mucosidad.
- Los síntomas de la alergia se inician de forma súbita, muy rápida y pueden desaparecer en menos de 24 horas, en la gripe o resfriado el inicio de los síntomas suele ser más lento, progresivo y no desparecen de forma súbita en menos de 24 horas, apareciendo mal estado general con dolor muscular y cansancio..
- El proceso puede durar en la alergia desde semanas hasta meses, manteniendo síntomas algunos días y otros no. El cuadro de gripe o resfriado suele remitir en una semana aproximadamente
Tal y como afirma la Dra. Cots, "sea un cuadro alérgico o no, lo importante es saber actuar a tiempo y minimizar los síntomas evitando su progresión a cuadros más importantes como puede ser una sinusitis, un episodio asmático, una bronquitis o una neumonía. En el caso de la alergia es fundamental hacer un correcto diagnóstico para poder prevenir su aparición. Si tiene la mínima sospecha de que pueda estar bajo los síntomas de una alergia debe acudir al especialista para determinar la causa y así poder evitar nuevos episodios. "