El incremento de los niveles de estrés a los que se enfrenta la población, el paulatino adelanto de la pubertad en los países más desarrollados, como Estados Unidos, y el mayor desarrollo de las herramientas de diagnóstico están favoreciendo un aumento en la aparición de problemas de salud mental a escala global, si bien persisten diferencias muy importantes entre países y regiones. En la actualidad, un 20% de la población global sufre cada año algún trastorno de salud mental en diferentes grados.
Esta es una de las ideas expuestas este fin de semana en Madrid por la doctora María Oquendo, presidenta de la Asociación Americana de Psiquiatría (APA), que participó como ponente principal en las II Jornadas Internacionales de Psiquiatría Basada en el Paciente organizadas por los servicios de Psiquiatría de los hospitales universitarios Fundación Jiménez Díaz-Grupo Quirónsalud, Rey Juan Carlos de Móstoles, Infanta Elena de Valdemoro y General de Villalba.
La doctora Oquendo expuso también la necesidad de que los países destinen más fondos a la salud mental, ya que actualmente apenas suelen suponer un 1% de los presupuestos sanitarios, sólo en el 2,8% de los países la salud mental atrae entre el 0,5% y el 5% de los fondos destinados a la salud. "Muchos países ni tan siquiera tienen una estrategia definida de salud mental, y eso a pesar de que estos trastornos tienen una repercusión muy importante en todos los problemas de salud de un individuo", explicó.
Según sus estimaciones, los problemas de salud mental suponen tasas similares de discapacidad a los déficits nutricionales, la tuberculosis y las patologías perinatales. Además, patologías como la depresión están presentes en un elevado porcentaje de quienes padecen otras enfermedades fisiológicas como cáncer (más del 33%), tuberculosis (más del 46%) o sida (más del 44%).
Los especialistas constataron que en los últimos años se ha incrementado la incidencia de estos trastornos entre la población, un fenómeno que a juicio de la doctora Oquendo responde a tres factores: la disponibilidad por parte de los especialistas de mejores herramientas diagnósticas; el incremento de los niveles de estrés a los que se ve sometida la población, lo que aumenta la "vulnerabilidad" ante los trastornos mentales; el adelanto paulatino de la pubertad en los países más desarrollados, como Estados Unidos.
"No sabemos exactamente cuál es el motivo, pero el cerebro se desarrolla de una manera diferente durante la adolescencia, y si este periodo comienza antes se da también una mayor vulnerabilidad; no en vano estimamos que el 50% de los problemas mentales se empiezan a detectar a partir de los 15 años de edad", añade la presidenta de la APA, que pronunció una conferencia titulada: "Salud mental global: soluciones para 2020".
Prevención del suicidio
Otro de los temas centrales de estas Jornadas ha sido la prevención del suicidio. En este sentido los más de 300 profesionales inscritos han podido conocer de cerca cómo funciona el programa Código 100, un instrumento pionero puesto en marcha por el Servicio de Psiquiatría del HUFJD, en colaboración con el SAMUR y la Comunidad de Madrid, con el fin de realizar un seguimiento adecuado de los diferentes casos y evitar así nuevos intentos de acabar con la propia vida.
"Hay muchas personas que intentan suicidarse y después no tienen un seguimiento adecuado; por eso pusimos en marcha el Código 100, del que pueden beneficiarse quienes ya han tenido un intento previo o tienen una ideación suicida muy intensa", explica el doctor Enrique Baca, jefe del Servicio de Psiquiatría del HUFJD y director de estas II Jornadas Internacionales.
"Gracias a este Programa ofrecemos a estas personas un tratamiento estructural, intensivo, que consigue su fidelización y hace que mejoren mucho", añade.
Cada día el Servicio de Psiquiatría del HUFJD atiende de uno a dos pacientes que han tratado de quitarse la vida; de ellos una tercera parte de los casos se corresponden con intentos nuevos de suicidio.
Otra de las novedades de este año ha sido el abordaje de los efectos en la salud mental del llamado Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Según el doctor Baca, esta patología, que suele ser tratada en primera instancia por los pediatras y seguida también por los neurólogos, requiere de un tratamiento multidisciplinar que incluya también las aportaciones de la psiquiatría, ya que "afecta a muchas esferas de la vida de las personas y las familias y tiene, sin duda, una importante vertiente de salud mental".
Los participantes abordaron también las últimas novedades en torno a la esquizofrenia, que afecta a un 1% de la población y es uno de los temas centrales de la especialidad psiquiátrica; así como toda la problemática de las adicciones en la salud mental.
Por último, se procedió a la entrega del I Premio José Rallo al Mejor Póster del congreso, llamado así en memoria del doctor Rallo, primer jefe de Psiquiatría del HUFJD y uno de los precursores de la especialidad en España. El ganador ha sido un sobre los déficits de memoria en casos de paranoia cuyo autor principal es el doctor Braulio Girela Serrano, del Hospital Santa Ana de Granada.
Al término del encuentro el doctor Baca destacó la relevancia de los contenidos abordados por los ponentes, felicitó a los ganadores del I Premio José Rallo y expresó su confianza en que estas Jornadas Internacionales se afiancen como una de las citas más relevantes de la psiquiatría española.