Hoy, 3 de mayo, se celebra el Día Mundial del Asma 2011. El lema de este año, "Puedes controlar tu asma", es un mensaje positivo que anima a los pacientes asmáticos a tomar el control en el cuidado de la enfermedad. El diagnóstico precoz del asma y la educación sobre la enfermedad y su tratamiento son esenciales para que el paciente pueda llevar una vida normal sin ningún tipo de limitación.
Más de 300 millones de personas en el mundo padecen asma, lo que la convierte en una de las enfermedades crónicas más prevalentes. Su incidencia se está incrementando y se estima que afecte a 100 millones de personas más en el 2025. En Europa occidental una de cada 250 muertes está asociada al asma y se producen 12.000 hospitalizaciones al día a causa de esta enfermedad.
Según una encuesta europea presentada en 2009, casi el 50% de los pacientes asmáticos sufre innecesariamente a pesar de estar en tratamiento porque no tiene un buen control de su enfermedad. Como consecuencia de este mal control, empeoran los síntomas y aumenta el riesgo de crisis repentinas, hospitalizaciones o incluso la muerte.
Cerca del 90% de las personas asmáticas aceptan padecer síntomas como parte normal de su situación cuando con el tratamiento y seguimiento correctos es posible el control del asma en la mayoría de los pacientes. Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), "el 95% de los asmáticos llevan una vida normal cuando realizan un tratamiento adecuado".
Los signos que alertan de que el asma no está controlado son síntomas persistentes durante el día y la noche (ahogo, pitos, opresión torácica, tos, secreción bronquial), despertares nocturnos, incapacidad para realizar actividades cotidianas, necesidad de recurrir a medicación de rescate más de dos veces a la semana, crisis que requieran hospitalización, etc.