El aumento de mamas es la intervención de cirugía estética más practicada en nuestro país, desbancando a la liposucción, que lo era hace cuatro años y pasa ahora a segunda posición. Es una de las conclusiones del informe La realidad de la cirugía estética en España 2014, presentado hoy por la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE). Como actualización de un estudio similar presentado en 2010, se basa en una encuesta realizada, entre febrero y junio de este año, a cirujanos plásticos y responsables de hospitales y centros sanitarios.
Tras el aumento de mamas y la liposucción, el ranking de las operaciones más demandadas continúa, por este orden, con la blefaroplastia o cirugía de los párpados, los rellenos con grasa autóloga (grasa extraída de otra parte del cuerpo del propio paciente), la rinoplastia o cirugía de la nariz y la intervención consistente en la combinación del aumento de mamas y su elevación. Les siguen otras operaciones hasta el total de 17 contempladas en el informe, que recoge datos estadísticos correspondientes a 2013.
Ese año, la suma de todas las operaciones de cirugía estética realizadas en nuestro país se situó en el entorno de las 65.000, con una facturación de 304 millones de euros. Un 23% de esta cantidad es atribuible a costes sanitarios, como el alquiler del quirófano, la anestesia, la hospitalización, etc., y un 10%, a las prótesis o implantes utilizados en gran parte de las intervenciones.
El 87,8% de las operaciones fueron practicadas a mujeres y el 12,2% a hombres, porcentajes muy parecidos a los de 2010. Esta disparidad en los porcentajes por sexos explica que el aumento de mamas encabece el ranking de intervenciones más realizadas, ya que es la más demandada por ellas, con un 28,2%. A continuación, las mujeres optan por la liposucción, la blefaroplastia, la combinación de aumento y elevación de mamas y la abdominoplastia.
La intervención más demandada por los hombres es la liposucción, seguida de la blefaroplastia, la rinoplastia, la ginecomastia y la otoplastia o cirugía de las orejas. La ginecomastia, término procedente de una palabra griega que significa "mamas similares a las de la mujer", es el aumento de tamaño de una o ambas glándulas mamarias en el hombre, generalmente por causas desconocidas aunque se asocie a veces al consumo de ciertos medicamentos o a algunos problemas médicos; la cirugía plástica interviene para la reducción o extirpación de dichas glándulas.
Por edades y con independencia del sexo, la franja de población comprendida entre los 30 y los 44 años es la que más recurre a la cirugía estética, con un 42,2%, situándose las franjas inmediatamente anterior y posterior en porcentajes inferiores al 30%. Cabe destacar que el informe de 2014, a diferencia del de 2010, incluye en sus estadísticas a los menores de 18 años, dado el interés mediático detectado por la SECPRE en los últimos años por esta franja de edad.
Según la encuesta, sólo el 1,3% de las intervenciones de cirugía estética en España corresponden a menores de edad y casi la mitad de ellas, el 46,5%, a otoplastias. La Dra. Marta García Redondo, secretaria general de la SECPRE, apunta que "la remodelación de las orejas o la reducción de su tamaño puede efectuarse en menores siempre que sean ellos mismos quienes demanden la intervención y exista un informe clínico que señale la conveniencia de ésta y los beneficios psicológicos que les reportará".
El aumento de mamas y la liposucción son, por este orden, las dos intervenciones más demandadas entre los 18 y los 44 años. A partir de los 45, la blefaroplastia encabeza el ranking, seguida nuevamente por la liposucción, mientras que el lifting facial empieza a cobrar importancia a partir de los 60, franja de edad en la que se sitúa en tercera posición, con más de un 14,4% de las operaciones.
Situación del sector y tendencias de mercado
Además de datos estadísticos sobre el número, tipología y coste de las intervenciones, La realidad de la cirugía estética en España 2014 incluye un sondeo a los profesionales del sector sobre el pasado, el presente y el futuro de éste, teniendo en cuenta la crisis económica y los cuatro años transcurridos desde la publicación del anterior informe. Así, respecto a los datos de 2010, el número de intervenciones de cirugía estética ha descendido en España en torno al 15%-18%.
Al margen de la crisis, los encuestados atribuyen este descenso, sobre todo, al intrusismo profesional. "No en vano -apunta el Dr. Miguel Chamosa, presidente de la SECPRE- esta Sociedad viene pidiendo desde hace años una ley reguladora para que sólo los profesionales con la titulación oficial de Especialistas en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora puedan realizar estas intervenciones. Por ello, recomendamos a los pacientes que exijan siempre esa titulación al médico que vaya a operarlos y que comprueben que la intervención se efectuará en un quirófano de un centro hospitalario o una clínica con todos los recursos necesarios para afrontar cualquier emergencia".
No obstante, preguntados por el futuro de la cirugía estética en nuestro país, los encuestados en el informe de la SECPRE se muestran mayoritariamente optimistas: un 57,4% de los cirujanos creen que el número de intervenciones crecerá en los próximos tres años y el 69,4% de los responsables de hospitales y centros sanitarios expresan la misma opinión.