El número de niños con alergias aumenta un 2% cada año en España, según datos de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), que augura que en las próximas décadas el porcentaje de niños con alergias en países desarrollados será del 50%. La SEICAP celebra desde este jueves su 42º Congreso Nacional en Málaga en el que abordarán, entre otros asuntos, la importancia de que las autoridades sanitarias formulen protocolos que garanticen la seguridad e integración de la población infantil alérgica. Así, aplaude las iniciativas que se están desarrollando en diversas comunidades, como Andalucía, donde se ha aprobado una Proposición No de Ley (PNL) para la implantación de un protocolo único y de obligado cumplimiento para todos los centros escolares andaluces, con medidas de prevención y actuación ante alergias alimentarias.
Un estudio llevado a cabo en EE.UU y publicado en el último número de la revista de la Academia Europea de Alergia e Inmunología Clínica confirma el aumento de la anafilaxia inducida por alimentos en los últimos años. Según este trabajo, las visitas a urgencias por este motivo aumentaron un 214% entre 2005 y 2014, sobre todo en bebés y niños más pequeños (entre los 0 y los 2 años), y el alimento causante en la mayoría de los casos fueron los frutos secos. "El aumento de las alergias en menores puede deberse a diversos factores, como los cambios en el tipo de alimentación o la contaminación atmosférica, entre otros", advierte la doctora Mercedes Escarrer, presidenta de SEICAP.
En la actualidad, según cifras de SEICAP, hasta un 35% de los niños de países desarrollados pueden presentar manifestaciones de enfermedades alérgicas, "pero se estima que en las próximas décadas puede alcanzarse el 50%", comenta la doctora Escarrer. Este aumento de las alergias infantiles, "hace visible aún más la necesidad de que, tanto el Área de la Acreditación Específica en Alergia Pediátrica como las unidades de Alergia Pediátrica, reciban un reconocimiento oficial, pues los pediatras alergólogos somos los profesionales que debemos actuar en la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades alérgicas en la infancia", señala.
Necesidad de protocolos en los colegios
Las alergias a los alimentos, las anafilaxias, la dermatitis atópica y el asma alérgicos se presentan con mayor frecuencia en la población infantil. "En muchos de estos casos, los problemas se hacen mayores cuando el niño llega al colegio, donde puede haber accidentes o descuidos que conduzcan a una crisis. Por ello es imprescindible crear un entorno que garantice la seguridad e integridad de estos alumnos", asegura el doctor Carlos Sánchez Salguero, coordinador del Grupo de Trabajo de Anafilaxia de la SEICAP. Un trabajo multicéntrico publicado en abril en la revista del Colegio Americano de Alergia, Asma e Inmunología comprueba que hasta el 25% de los eventos anafilácticos ocurren por primera vez en la escuela y advierte de la importancia de que las áreas de enfermería de los colegios cuenten con autoinyectores de adrenalina para atender los casos de urgencia.
Las alergias alimentarias más frecuentes en niños, que son las que más pueden causar la anafilaxia, suelen ser las de la leche, huevo, frutos secos y pescado. "En los casos graves, la ingesta accidental de estos alimentos, puede desembocar en una anafilaxia que, si no se atiende rápido y de forma adecuada puede resultar mortal", advierte el doctor Sánchez Salguero. Por ello, desde la SEICAP se reclama la existencia de protocolos de actuación para que el personal escolar esté formado y coordinado con el personal sanitario en la atención de posibles emergencias. "Ofrecemos nuestro apoyo a las autoridades sanitarias y educativas para trabajar de manera conjunta en proyectos que contribuyan a mejorar la calidad de vida y asistencial de estos alumnos", indica.
Por ello, apuestan por tomar como ejemplo el programa Alerta Escolar, impulsado por pediatras alergólogos miembros de SEICAP en Baleares y que hasta ahora ha obtenido buenos resultados. "Gracias a él se posibilita la asistencia urgente e inmediata en colegios en caso de crisis grave con peligro para la vida", explica la doctora Escarrer, impulsora de la iniciativa en Baleares. Con él, el personal educativo sabe cómo actuar ante una reacción alérgica gracias a los conocimientos adquiridos y a la ayuda de los servicios de emergencias que tienen un registro del historial completo de cada alumno diagnosticado. También en Andalucía se lleva a cabo el Programa Aire, una iniciativa del 061, que cuenta con la colaboración de pediatras alergólogos, y está dirigida a pacientes asmáticos y alérgicos a alimentos. Mediante este programa se forma al profesorado en la actuación en emergencias vitales y fomenta la prevención de crisis con la mejora de la asistencia sanitaria urgente.