Con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Diabetes el próximo 14 de noviembre, el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) ha destacado que entre el 15% y el 25% de los pacientes con diabetes mellitus padecen úlceras de pie diabético. Estos datos se extraen de una memoria presentada por el Consejo General de Colegios Oficiales de España al Ministerio de Sanidad para justificar la inclusión del podólogo en el Sistema Nacional de Salud.
"El tema de las úlceras es un asunto muy delicado en las personas diabéticas, ya que suelen tener problemas para cicatrizar y pueden complicarse. El caso extremo es llegar a requerir la amputación total o parcial del miembro inferior y esto supone un gran coste emocional, social y económico", ha explicado Maite García, presidenta del ICOPCV.
España tiene una tasa de amputación mayor en adultos de 52 por cada 100.000 habitantes, lo que la sitúa por encima de otros países europeos como Francia, Reino Unido o Italia.
El "pie diabético", cuya prevalencia es mayor en personas entre 45 y 65 años, se caracteriza por la presencia de problemas circulatorios (arteriopatía periférica), pérdida de sensibilidad en los pies por afección de los nervios periféricos y aparición de úlceras así como de problemas de cicatrización.
"Por ello, es tan importante la prevención y actuar con rapidez en este caso. Además, de realizarse revisiones diarias de los pies para confirmar que no haya ningún daño, muchas veces como tienen problemas de sensibilidad no notan que pueden tener heridas o haberse clavado algo, requieren que sea un podólogo el que les ayude a escoger el tipo de calzado más adecuado y les vaya revisando periódicamente para tratar con urgencia cualquier anomalía. Por este motivo, no dejaremos de trabajar hasta que la Podología forme parte del Sistema de Salud Público y los pacientes reciban adecuadamente la atención sanitaria a la que tienen derecho", ha continuado Maite García.
Desde el Colegio se ha destacado que un calzado con costuras interiores que generara un simple roce en la piel por la fracción al caminar, podría ser la causa de una úlcera. A su vez, un calzado demasiado ancho o demasiado estrecho también puede generarles problemas. "En el caso de las personas diabéticas es esencial realizar un estudio de la pisada y escoger en cada caso el calzado más conveniente según la propia fisiología del paciente", ha explicado Maite García.
Junto a esto, algunas recomendaciones para cuidar adecuadamente los pies de las personas diabéticas son una buena higiene y secado de los pies, la hidratación diaria de los mismos, utilizar calcetines de materiales naturales como el algodón y sin costuras, que no opriman en el tobillo para evitar que se dificulte la circulación sanguínea.