El TDAH es un grado de déficit de atención y/o hiperactividad-impulsividad que resulta desadaptativo e incoherente en relación al nivel de desarrollo del paciente y está presente antes de los 12 años de edad. Fue descrito en 1902 por el Dr. Still y se le ha denominado de hasta 50 formas distintas.
Constituye un problema de salud pública debido a:
- Su alta prevalencia durante la infancia, afecta al 5-7% de la población escolar, siendo más frecuente entre los varones.
- Su inicio precoz, incapacitante y crónico. El trastorno se inicia en la infancia continua durante la adolescencia y edad adulta hasta en el 40-70 % de los casos.
- Afecta a las diferentes esferas del comportamiento: familiar, escolar y social.
- Y tiene una alta comorbilidad, por lo que siempre deben investigarse otras patologías asociadas que conllevan un gran riesgo para el paciente.
El diagnóstico es complicado. Entre niños pequeños de 1-3 años, Se observa variación temperamental, impulsividad, alteraciones de la regulación y una adaptación social limitada, en la interacción del niño con la familia. No obedece, no respeta las normas y molesta. Puede haber alteraciones del sueño, del lenguaje y del desarrollo motor. En los preescolares de 3-6 años, puede observarse menor intensidad y duración en el juego, inquietud motora, déficits en el desarrollo, conducta desafiante, problemas de adaptación social, accidentes, dificultades en la coordinación motor. En la etapa escolar 6-12 años, suele ser cuando aumentan las consultas a los profesionales de la salud. Es el grupo de edad para el que se dispone de la mejor evidencia científica, tanto para el diagnóstico como el tratamiento. Los síntomas se manifiestan de forma más clara. En la adolescencia disminuye la hiperactividad y se mantiene la inquietud e impaciencia. Son frecuentes los problemas académicos, la baja autoestima y problemas de comportamiento con la familia y el entorno, aumento de las conductas de riesgo: drogas, sexo, delincuencia, accidentes, violencia.
El diagnóstico y tratamiento deben realizarse por un facultativo con experiencia. El tratamiento debe ser multimodal e individualizado tanto farmacológico como no farmacológico, con la coordinación de especialistas y el apoyo familiar, escolar y social.
El tratamiento del TDAH por parte del Pediatra, el Neurólogo o el Psiquiatra será uno de los temas a tratar en el XXVIII Congreso anual de la SEPEAP, la Sociedad Española de Pediatrías Extrahospitalaria de Atención Primaria, que reunirá en Valencia del 23 al 25 de Octubre a más de 1.000 de los cerca de 9.000 pediatras españoles para tratar las últimas novedades de tratamientos y avances en la especialidad aportados por los mejores expertos nacionales e internacionales.
Entre los temas a tratar el Congreso debatirá la polémica de las vacunas en España, los modelos de salud infantil en Europa, el valor social de los niños, la hidratación infantil, los anticatarrales, los dolores abdominales, los mareos, los problemas en el contexto familiar, las infecciones de orina, el uso de la Vitamina D, los modelos de gestión clínica, las salidas laborales de los MIR en pediatría, e incluso se formará a más de 100 niños que realizarán simultáneamente unas prácticas de RCP.