Con la llegada de la época estival las visitas a la consulta de sexología aumentan en más de un 25%.
El principal motivo es que en verano se dispone de más tiempo libre para estar en pareja y disfrutar de la sexualidad. Las mujeres ya no van a consulta por miedo a perder a sus parejas sino porque exigen una vida sexual de calidad.
La mayoría de mujeres que acuden a terapia sexual lo hacen por falta de deseo sexual, que en muchos casos está ligada a la falta de lubricación. Gran parte de las disfunciones sexuales femeninas mejoran con los ejercicios de suelo pélvico. Además, estos ejercicios mejoran la lubricación vaginal y la elasticidad. En ocasiones, esta lubricación se altera por cambios como la utilización de métodos anticonceptivos de tipo hormonal, el uso de la píldora o el anillo, por presencia de hongos o irritaciones, estrés, etc.
Según la sexóloga Marta Ibáñez, asesora experta de centradaenti de Tena Lady, "los ejercicios de suelo pélvico son clave a la hora de mejorar la satisfacción de la mujer. La razón es que los ejercicios del suelo pélvico fortalecen la tonicidad del músculo pubococcígeo, también llamado músculo del amor. Este músculo es el más importante de los que forman el suelo pélvico, pero también es el responsable de las contracciones de la vagina. Por lo tanto, juega un papel fundamental en las relaciones sexuales".
Mediante los ejercicios se consigue mejorar el funcionamiento de las glándulas encargadas de la producción del líquido lubricante. Así, al poco tiempo de comenzar la rutina de ejercicios para el suelo pélvico, se puede apreciar un aumento de la lubricación y sensibilidad que mejora las relaciones sexuales.
Además, muchas de las mujeres con problemas para llegar al orgasmo o que creen no haber logrado nunca uno, podrían notar gran mejoría al fortalecer su suelo pélvico, puesto que estos músculos son los que se contraen y relajan en el momento del orgasmo. Si está sano y ejercitado, la sensación es mucho más intensa y la duración de los orgasmos es mayor.