La revista Plos Une ha publicado un estudio realizado por investigadores del King's College de Londres (Reino Unido) que ha analizado los datos de 20.000 personas de todos los miembros de la Unión Europea. Según los datos observados entre 2006 y 2010, los pacientes con enfermedad mental han visto incrementada su tasa de paro mucho más que el resto de la población.
En personas diagnosticadas por enfermedad mental, el aumento en el paro ha sido de 5,2%, el doble que entre el resto de la población sana de Europa. Entre los subgrupos, aquellos más dañados por la recesión económica han sido los varones cuyo nivel de estudios es más bajo.
Según Sara Evans-Lacko, la principal autora e investigadora del estudio, "este es el primer análisis en profundidad sobre el impacto que está teniendo la crisis económica en una población especialmente vulnerable como los aquejados por enfermedad mental". Otro de los colaboradores del estudio, Graham Thornicroft, ha mencionado "la importancia que tiene en el desempleo el estigma y la discriminación que sufren estos pacientes".
En definitiva, el paro provoca un empeoramiento en el curso de la patología y agrava el factor de la exclusión social que padecen estos pacientes. El estudio ha concluido afirmando que "dados los recortes, el impacto de la recesión se sentirá especialmente en individuos con pocos recursos".