Según los resultados de un estudio publicado en la revista Sleep Breath, las personas que roncan son más propensas a desarrollar diabetes de tipo 2 que los no roncadores.
En este trabajo se explica como la relación entre los trastornos respiratorios del sueño y la diabetes se deben a que los roncadores tienen pausas en su respiración mientras duermen debido a la relajación de la musculatura que estrecha las vías respiratorias. De este modo, se dificulta la entrada de oxígeno a los pulmones y, consecuentemente, se interrumpe la cadena metabólica de la glucosa.
Las personas que roncan deben consultar con su médico ya que el ronquido puede ocultar un síndrome de apnea obstructiva del sueño y puede estar asociado con otras enfermedades graves como la hipertensión arterial o el ictus. Su prevalencia es elevada ya que se estima que se presenta en alrededor del 40% de los varones y el 20% de las mujeres, y aumenta con la edad.
Entre las medidas que puede adoptar una persona para intentar disminuir los ronquidos es reducir el peso corporal si sufre sobrepeso, evitar los alimentos pesados en las cenas y disminuir el consumo de alcohol y tabaco sobre todo en las últimas horas del día. En casos severos se puede acudir a la cirugía para curar este problema respiratorio.