El I Estudio sobre la depresión postparto en España, llevado a cabo por la firma de puericultura Suavinex, revela que más de un tercio de las madres españolas asegura haber sufrido depresión postparto. Son, en concreto, un 35,14% las que afirman que han pasado por este trastorno del estado de ánimo después de dar a luz.
Sin embargo, esta cifra podría ser aún más elevada, pues el estudio demuestra que más del 90% de las mujeres confiesa haber sufrido síntomas comunes de la depresión postparto en el periodo del puerperio. Entre estos se encuentran sentimientos de tristeza, cansancio, irritabilidad o ansiedad; pero también se cuentan la dificultad para crear vínculos con el bebé, la culpa e incluso la idea de hacer daño al bebé o a sí mismas (pensamiento común en un 2,62% de las madres).
Sin embargo, de los datos obtenidos en el estudio, se infiere que son más las mujeres que han podido llegar a padecer este trastorno. Mujeres que, por falta de información, no han sabido reconocer sus dolencias.
El desconocimiento es uno de los grandes problemas
Según el estudio elaborado por Suavinex, aproximadamente el 40% de las mujeres que aún no son madres no sabe lo que es la depresión postparto. En el caso de las madres, solo un 14,6% desconoce este trastorno, aunque el 35,28% afirma no haberlo descubierto hasta después del embarazo.
Estos datos son aún mayores si los trasladamos a los hombres. En este caso, prácticamente la mitad de los entrevistados que no son padres desconocen por completo esta enfermedad y, en el caso de los que ya tienen hijos, roza el 30%.
Las mujeres españolas no recurren a atención médica profesional
Otro de los grandes problemas en torno a la depresión postparto es la falta de confianza en los profesionales de la salud. Así, casi tres cuartos de las mujeres que afirman haber sufrido depresión postparto no han sido diagnosticadas por un profesional.
Lejos de estos datos, el 43,3% de ellas afirman haber basado su confianza para llegar al diagnóstico en blogs, foros y redes sociales y casi un tercio lo han hecho fiándose de su entorno más cercano. Esto desvela que la confianza de los padres en la red es cada vez más importante y esta goza de una influencia más fuerte que nunca, llegando en ocasiones a complementar o sustituir a los profesionales médicos como prescriptores y fuente de información.
Estas conclusiones se acentúan aún más si tenemos en cuenta que solo un 46,82% de las mujeres diagnosticadas profesionalmente decidió tratar su trastorno con fármacos, terapia psicológica o la combinación de ambas.
El apoyo de la pareja puede ser fundamental
Casi el 13% de las mujeres que ha padecido este trastorno afirma no haber sentido el suficiente apoyo emocional de sus parejas. La comprensión y el respaldo incondicional de la pareja durante el proceso del embarazo, parto y postparto es fundamental, especialmente si tenemos en cuenta estas cifras.