El Instituto de Investigación Vall d'Hebrón (VHIR) lidera un ensayo europeo con el que se pretende comprobar si es efectiva la aplicación de un colirio en las etapas iniciales de la retinopatía diabética. Este trabajo abre una nueva estrategia para combatir las fases iniciales de esta complicación de la diabetes.
Esta enfermedad ocular puede aparecer en personas que sufren diabetes
A través de este estudio se pretende demostrar que la retinopatía diabética, antes de ser una patología de los pequeños vasos de la retina, es una enfermedad neurodegenerativa. Por ello, se llevará a cabo un ensayo clínico para evaluar si las estrategias terapéuticas basadas en la neuroprotección son eficaces no solo para prevenir la neurodegeneración de la retina, sino también para prevenir el desarrollo y la progresión de las primeras etapas de la retinopatía diabética y frenar su evolución.
Según explica el Dr. Rafael Simó, director del Grupo de Investigación de Diabetes y Metabolismo del VHIR y coordinador del proyecto, "hasta hace poco, el uso de gotas para los ojos no se había considerado una vía adecuada para la administración de fármacos en el tratamiento de la retinopatía diabética, ya que se pensaba que no llegaban a la retina". "Sin embargo, estudios recientes demuestran que muchos fármacos administrados en colirio son capaces de llegar a la retina en concentraciones terapéuticas, añade el experto.
Además, según el Dr. Simó, "los métodos utilizados en este proyecto permitirán diagnosticar la retinopatía diabética en etapas incipientes y pueden cambiar los métodos actuales de detección precoz de esta enfermedad".
Esta enfermedad ocular, que puede aparecer en personas que sufren diabetes y no tienen un buen control de su enfermedad, es una de las principales causas de ceguera en los países desarrollados.
En la retinopatía diabética se suceden cambios en los vasos sanguíneos diminutos que nutren la retina, en la parte posterior del ojo, que a largo plazo pueden llevar a una pérdida severa de la visión.