La startup ALVUM, una de las ganadoras de la cuarta edición del programa pionero de apoyo al emprendimiento social en salud, Emprende inHealth, impulsado por Lilly y UnLtd Spain, ha lanzado la tecnología B.Energy. Se trata de una aplicación móvil que permite a los pacientes con Síndrome del Intestino Irritable registrar datos relacionados con su estilo de vida, su dieta o la escala de Bristol para la clasificación de las deposiciones. Todo ello con el objetivo de ayudar a los pacientes a controlar este síndrome. Próximamente, la aplicación incorporará, además, otras dos herramientas para el control de intolerancias y de la microbiota.
El Síndrome del Intestino Irritable afecta aproximadamente a un 15% de la población, mayoritariamente a mujeres de entre 25 y 45 años. Sin embargo, se trata de una patología infradiagnosticada que, además, se detecta con retraso. "En parte, cuando nosotros mismos empezamos a detectar los síntomas no excusamos con argumentos como que nos ha sentado mal la comida o que hemos comido tarde. El paciente tiende a normalizar una situación que no lo es, moldea su vida en torno a ella y solamente acude al médico cuando su estado le supera", ha apuntado Anna Sort, cofundadora y directora de marketing de la startup.
"Cuando el paciente acude al médico, el proceso se alarga ya que hoy en día no existe una prueba diagnóstica específica para el colon irritable. El gastroenterólogo empieza a realizar pruebas para descartar otras enfermedades como intolerancias, alergias o úlceras. Al final, por descarte, diagnostica SII", ha comentado la emprendedora.
La aplicación permite a los pacientes registrar datos relacionados con la escala de Bristol, su estilo de vida y su dieta. Gracias a estos datos, la aplicación brinda al usuario consejos personalizados para corregir su estilo de vida y hábitos de consumo de cara a mejorar su salud intestinal.
"La microbiota es individualizada y el proceso para equilibrarla es diferente en cada paciente. De ahí la necesidad de personalización que obtenemos gracias a la aplicación. Además, ofrecemos informes hechos a medida de cada paciente con el que le educamos para corregir algunas ideas preconcebidas sobre la dieta como, por ejemplo, que comer sano es comer solamente alimentos vegetales", señala Anna Sort.
Para el diseño de la aplicación se ha contado con profesionales médicos, enfermeros y nutricionistas. Actualmente, además, están trabajando con profesionales para el diseño de un análisis de microbiota más sencillo para completar las herramientas y prestaciones de la aplicación.