Este año los colaboradores de ESTEVE han aportado10.573 kilos de alimentos y 1.461 kilos de ropa para los más necesitados con sus campañas "Cómete el hambre" y "Haz renacer tu ropa". Es el sexto año que los empleados de ESTEVE colaboran en estas iniciativas, y el segundo consecutivo que las campañas se han convocado en verano y en Navidad para poder realizar una mayor contribución a las crecientes necesidades sociales como consecuencia de la crisis económica.
La campaña ‘Cómete el hambre' ha contado con la participación de los empleados de ESTEVE en España y de las filiales de Portugal, Italia, Turquía, México y China, que han donado más de 10 toneladas de alimentos básicos no perecederos (como pasta, arroz, legumbres, leche y aceite), la mitad donados directamente por los colaboradores y la otra mitad por la compañía. La donación se ha entregado a distintas entidades sociales locales y a otras organizaciones benéficas con quienes la compañía colabora desde hace años para, desde allí, hacerlos llegar a las familias más necesitadas.
Además, esta campaña también se ha acompañado de una acción de voluntariado, como ha sido la colaboración en la Gran Recogida de alimentos en colaboración con varios Bancos de Alimentos, donde este año han participado 122 voluntarios de ESTEVE.
Por su parte, la campaña "Haz renacer tu ropa", consistente en que los trabajadores donen ropa de segunda mano coincidiendo con los cambios de armario, se ha convocado en todos los centros de ESTEVE en España. En total, se han donado 1.461 kilos de ropa, que se han entregado a la Fundació Formació i Treball de Cáritas, una entidad que se dedica a la inserción laboral de personas con dificultades personales, sociales y laborales y encargada de gestionar el abastecimiento de ropa y otros recursos a familias.
Un compromiso social que también es internacional
Fuera de España, los voluntarios de ESTEVE han colaborado en dos situaciones de emergencia vividas durante este año. La primera de ellas, en Nepal, a raíz del terremoto del pasado mes de abril y en respuesta a la llamada de ayuda del gobierno nepalí ante los 11.000 heridos, los 70.000 hogares destruidos y los más de 8 millones de afectados. El total de las aportaciones realizadas por los colaboradores y por ESTEVE se donaron a Cruz Roja para la compra y envío de materiales de primera necesidad.
La segunda de ellas, en Siria y a través del Fondo de Ayuda Humanitaria (FAHE) de Farmamundi, de quien ESTEVE es miembro, para cubrir las necesidades básicas de las personas refugiadas y en tránsito en la frontera entre Serbia y Hungría. Las aportaciones han servido para suministrar kits higiénico-sanitarios, paquetes nutricionales y artículos de primera necesidad en las zonas de Sobótica y Kanzija, cercanas a la frontera con Hungría, principal punto de entrada de las personas migrantes y refugiadas.
Todas estas acciones forman parte del Plan de Voluntariado Corporativo de ESTEVE, que se llevan a cabo tanto en la población más vulnerable de nuestro país (Cuarto Mundo) como en países en vías de desarrollo (Tercer Mundo).