Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se registran alrededor de 1,4 millones de casos de hepatitis A, una enfermedad causada por el virus de la hepatitis A (VHA), que se transmite principalmente por vía oral-fecal mediante el agua o los alimentos. El VHA es un virus de la familia de los picornavirus (con ARN como material genético), con una cápside icosaédrica, siendo altamente resistente a las condiciones ambientales, y del que sólo se ha descrito un único serotipo.
El virus A de la hepatitis tiene muchas particularidades y es difícil de estudiar y manipular en el laboratorio. Aún se desconocen muchos aspectos de su biología y tiene un ciclo de replicación muy lento, por lo que el proceso para obtener el antígeno para las vacunas será también lento y costoso.