Según un estudio realizado por la Sociedad Española de Cardiología y Periodoncia (SEPA), la acumulación de placa bacteriana puede provocar, además de caries, gingivitis y periodontitis, otros problemas de salud, como enfermedades cardiovasculares. Según este estudio, las personas con periodontitis (inflamación e infección en las encías) tienen entre un 25 y un 50% más de posibilidades de sufrir una cardiopatía isquémica.
Debido a que la salud bucodental tiene muchos más efectos de los que se puede pensar, es esencial que los mayores no la descuiden. La doctora Patricia Zubeldia Masset, odontóloga responsable asistencial de la Dirección Médico-Asistencial de Sanitas Dental, aporta algunos consejos básicos que podrían resumirse en la pauta 3-2-1:
- 3 veces: cepillarse tres veces al día después de cada comida, especialmente antes de dormir, ya que durante la noche las bacterias tienen más tiempo de actuar.
- 2 minutos: cepillarse los dientes durante un tiempo mínimo de dos minutos, complementándolo con enjuagues bucales y seda dental. Utilizar cepillo eléctrico si hay menos destreza o para facilitar el cepillado. No hay que olvidarse de cepillar la lengua.
- 1 revisión mínima anual: revisarse periódicamente. Nunca menos de una vez al año.
3 de cada 10 mayores de 60 no se cepillan diariamente o lo hace solo una vez al día
A pesar de que casi 9 de cada 10 mayores preguntados por Sanitas Dental son conscientes de que descuidar la salud bucodental puede provocarles otras enfermedades graves, más del 30% no se cepilla diariamente o lo hace solo una vez al día, según el último Estudio Sanitas de Salud Bucodental. Además, cerca de la mitad de los encuestados (44,8%) manifiesta no usar nunca la seda dental y un 26% visita al dentista solo cuando detecta algún problema. El 44% reconoce que lo que principalmente motiva su falta de higiene bucodental es la ausencia de hábito.
En este sentido, el doctor David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial, destaca la importancia de la concienciación, además del papel fundamental del cuidador quien, en función del deterioro cognitivo de la persona, debe preocuparse de recordar a los mayores las rutinas para su higiene bucodental. Asimismo, debe asegurarse de que siempre tenga los utensilios que necesite para poder cumplir con las mismas: cepillo, pasta, enjuague, etc.
El papel fundamental de la alimentación
Por otro lado, la alimentación juega un papel fundamental en la salud general y también en la bucal. Lo óptimo es seguir una dieta equilibrada y reducir el picoteo entre comidas. Consumir una cantidad de agua adecuada diariamente y una alimentación variada con presencia de cada uno de los cinco grandes grupos específicos de alimentos: cereales, frutas, hortalizas, alimentos con proteínas, productos lácteos y legumbres.
En términos generales, algunos alimentos pueden ser perjudiciales, como los alimentos ácidos, azucarados y las bebidas carbonatadas y edulcoradas. También conviene limitar el consumo de ciertas sustancias que pueden dañar y amarillear el esmalte de los dientes, como el tabaco, el vino, el café, el chocolate y algunos alimentos artificiales con colorantes. Por su parte, otros alimentos se consideran beneficiosos para la salud bucodental. Es el caso del calcio, las verduras y los alimentos que proporcionan una correcta masticación como manzanas, así como alimentos que contengan ácidos grasos omega 3 y omega 6, y vitamina C.