Según la Sociedad Española de Cardiología (SEC), el control de la insuficiencia cardiaca se ha convertido en la actualidad en uno de los principales retos de la medicina, por el elevado número de personas que la padecen y porque es la principal causa de hospitalización en España.
En este sentido, el Dr. Nicolás Manito, presidente de Sección de Insuficiencia Cardiaca y Trasplante de la SEC, ha afirmado que "el envejecimiento progresivo de la población y el aumento de los principales factores de riesgo cardiovascular (hipertensión, obesidad, diabetes, etc.) ha provocado que en los últimos diez años, la incidencia de esta enfermedad haya aumentado un 30% y se prevé que siga aumentando en los próximos años".
La insuficiencia cardiaca es una grave patología que afecta a la estructura o funcionamiento del corazón, provocando que este no pueda bombear el suficiente flujo de sangre para satisfacer las necesidades de oxígeno y nutrientes que necesita el organismo.
Esto provoca que el cuerpo no pueda eliminar los desechos naturales que produce, lo que genera una acumulación de líquido en los pulmones y en otras partes del cuerpo, como por ejemplo las extremidades inferiores y el abdomen.
Esta enfermedad aparece como consecuencia del padecimiento de otra patología que ya ha dañado con anterioridad el corazón, como un infarto de miocardio, enfermedad coronaria o hipertensión arterial, o bien por el alcoholismo y la drogadicción.
Hoy en día, se dispone de diversas opciones de tratamiento para la insuficiencia cardiaca según su gravedad. El control de los factores de riesgo, la administración de fármacos vasodilatadores o de betabloqueantes, la realización de una angioplastia primaria o la implantación de un desfibrilador son algunos de ellos.
"Cuando todos estos tratamientos no funcionan, o ante la insuficiencia cardiaca avanzada, que se da en el 10% de los casos, la única opción terapéutica que nos queda es el trasplante cardiaco, ya que el corazón del paciente es incapaz de bombear sangre en un volumen adecuado por sí mismo", ha explicado el experto. Además, "en los últimos años se están creando nuevos dispositivos mecánicos que tienen la capacidad de cumplir la función cardiaca", ha añadido.