La semana que viene comienzan las fiestas navideñas. Días para darse caprichos y disfrutar de la familia y amigos. Pero también se trata de una época caracterizada por un alto nivel emocional en la que no debemos descuidar a nuestros mayores.
La gran cantidad de actividades a realizar durante estas fiestas es una muy buena oportunidad para que los mayores colaboren. "Sentirse partícipes de las actividades que realizamos durante las Navidades hará que se sientan útiles. Esto mejorará considerablemente su estado anímico, lo que derivará en una mejora en su salud", apunta David Curto, responsable de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores.
Así, es recomendable pedirles que echen una mano elaborando, por ejemplo, con los adornos de navidad, con acciones tan simples como colocarlos en el árbol. "Las actividades manuales como la realización de talleres de fabricación de adornos navideños reportan enormes beneficios a la autoestima y socialización de las personas mayores que están, por ejemplo, en una residencia o centro de día", comenta Curto.
Otra buena ocasión para que los mayores se impliquen tanto física como mentalmente en la Navidad es la preparación de los menús de las diferentes comidas y cenas. Acciones como recordar una receta familiar, o colocar el turrón en una bandeja, son algunas de las actividades aconsejadas en este sentido.
Igualmente, algo tan típico en esta época del año como, por ejemplo, cantar villancicos, está especialmente recomendado para aquellas personas con principio de alzhéimer. Desde Sanitas Mayores explican: "Los mayores que sufren demencia encuentran en las canciones de la infancia una forma de diversión en la que se sienten cómodos y les permite disfrutar y reafirmarse".
La celebración de estas fiestas se convierte, por tanto, en una ocasión perfecta para conseguir que los mayores se impliquen mediante la realización de actividades propias de las terapias no farmacológicas que les reportan grandes beneficios para su salud.