Según afirma el Dr. Guillermo Miranda, médico rehabilitador de la Unidad de Rehabilitación Cardiorespiratoria del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria con motivo del XI Curso Teórico-Práctico que la Sociedad Española de Rehabilitación Cardiorespiratoria (SORECAR) celebra en Madrid, el abandono del hábito tabáquico ocho semanas antes de someterse a una cirugía torácica y abdominal reduce las complicaciones pulmonares a la mitad, disminuyendo así la mortalidad y la estancia hospitalaria de los pacientes que se pueden ver afectados.
Por el contrario, el especialista añade que "se han observado más complicaciones en los pacientes que dejan de fumar una o dos semanas antes de la cirugía que en los que siguen fumando". Además, "la pobre capacidad de ejercicio, el mal estado nutricional y ser mayor de 70 años, entre otros motivos," son factores que también implican una significativa incidencia de complicaciones respiratorias.
Además, según destaca la presidenta de la SORECAR, Ester Marco, "la rehabilitación es una de las estrategias recomendadas por la comunidad científica internacional para prevenir complicaciones derivadas de la cirugía cardiotorácica". "El acondicionamiento físico general y el entrenamiento de los músculos respiratorios permiten que los pacientes lleguen al quirófano en condiciones óptimas", añade.