Seguir correctamente los tratamientos es uno de los retos a los que nos tenemos que enfrentar a medida que nos hacemos mayores y acumulamos diferentes enfermedades de carácter crónico. La diferencia entre hacerlo bien o no, puede tener importantes implicaciones para la salud del paciente, es por ello que los farmacéuticos se han implicado en dar herramientas y formación que faciliten un buen uso de los medicamentos para que tengan el efecto deseado.
Adherencia a los tratamientos y evitar errores en la medicación, claves para garantizar una buena salud
Una de las herramientas con la que los farmacéuticos cuentan para ayudar a las personas mayores a seguir correctamente los tratamientos es el Sistema Personalizado de Dosificación. En Barcelona hace más de 10 años que desde el Colegio se impulsó este servicio. Gracias a un blíster con la medicación ordenada por días de la semana y horarios, las más de 920 farmacias que lo ofrecen facilitan a este sector de la población tener más claro qué medicamentos tiene que tomar y evitar así errores en la medicación. A la vez, contribuyen a optimizar la adherencia a los tratamientos y mejorar los resultados de salud de los más de 21.500 pacientes atendidos.
Más de 650 personas mayores aprenden a utilizar adecuadamente los medicamentos
Gracias al Programa de Educación sanitaria a la gente mayor, en el que participan un centenar de farmacias de Barcelona, en 2014 más de 650 personas de edad avanzada mejoraron sus conocimientos sobre cómo utilizar adecuadamente los medicamentos. El programa tiene por objetivo dotar de más autonomía a las personas mayores para fomentar el uso racional de los medicamentos a través de las sesiones que imparten los farmacéuticos comunitarios en diferentes ubicaciones, como por ejemplo casales, centros cívicos y asociaciones.
Este programa está enmarcado en el Plan de Salud 2011-2015 y en el proyecto europeo "Envejecimiento activo y saludable", en el que se recogen iniciativas llevadas a cabo en Europa enfocadas a prolongar una vida activa e independiente de las personas mayores de 65 años.
Radares, detectar desde la farmacia personas de edad avanzada en riesgo de exclusión social
Con Radares, un proyecto del Ayuntamiento de Barcelona al cual se han adherido de forma voluntaria más de 290 farmacias de la capital catalana, se persigue prevenir y reducir los problemas de exclusión social de las personas mayores.
Actualmente hay farmacias radares distribuidas en los diferentes distritos de Barcelona, hecho que permite hacer el seguimiento a alrededor de 600 personas. A su vez, el farmacéutico puede participar de diferentes formas: como radar básico, donde se dedica a identificar y comunicar la situación de riesgo; también puede ofrecer la farmacia como espacio de mediación entre el servicio social y el usuario; y finalmente, puede participar como radar especializado, fase en la cual el farmacéutico actúa como agente de salud y se encarga, entre otras cosas, de revisar medicamentos, mejorar la adherencia al tratamiento, hacer un seguimiento farmacoterapéutico, impartir educación sanitaria y acompañar en la adquisición de hábitos de vida saludables.