El eczema dishidrótico se caracteriza por la presencia de unas pequeñas vesículas en los laterales de los dedos, en los bordes de las palmas de las manos y en las plantas y dedos de los pies. Son unas burbujitas muy pequeñas, como cabezas de alfiler, que producen picor intenso al paciente. Este tipo de eczema suele aparecer más en las mujeres que en los hombres y, con frecuencia, se revientan con el constante rascado, liberando una pequeña cantidad de líquido.
El eczema dishidrótico se caracteriza por la presencia de unas pequeñas vesículas en las manos
Esta afección es frecuente y, aunque es de causa desconocida, se baraja la hipótesis de que se trate de una respuesta del organismo al propio sudor del paciente en una piel con un fondo atópico, encontrándose con frecuencia estas lesiones en pacientes que sufren otras enfermedades dermatológicas, como la dermatitis atópica.
En ocasiones, los niños con dermatitis atópica presentan estas ampollitas de forma recurrente, en brotes a lo largo del año, coincidiendo con las estaciones más calurosas. Esto complica el cuadro dermatológico de base de estos pacientes.
La dermatitis atópica es cada día más frecuente y se calcula que, actualmente, la sufren más del 5% de la población. Por ser una enfermedad crónica que evoluciona en forma de brotes a lo largo de la vida del enfermo, condiciona de una manera drástica su calidad de vida. Se debe prestar especial atención a los posibles solapamientos de patologías ya que empeoran el cuadro de base y prolongan los periodos activos de la enfermedad.